Para llorar

Diario Sur, , 23-03-2016

Federica Mogherini, jefa de la diplomacia europea, dijo en una rueda de prensa en Ammán que ayer era «un día muy triste para Europa». Y se puso a llorar. Anda y tira para la casa. ¿Eso es lo que tenemos como alta representante de Exteriores? ¿Cómo no va a ser Bruselas la capital del yihadismo? A Marine le Pen, que no habría soltado una lágrima, los atentados le han pillado en Canadá, donde ha criticado «la sociedad multicultural» y la política migratoria de un país que ha aceptado a 25.000 refugiados sirios. A Houellebecq no lo he escuchado. «Sorry for Brussels», se leía en el cartel que un niño refugiado levantaba en Grecia. ¿Por musulmán? ¿Dando la razón a Le Pen? Nigel Farage llamó a Bélgica «no país». De Gaulle decía que era un país inventado por los ingleses para molestar a los franceses. Bélgica es un ‘sí país’. Como Gran Bretaña, Francia o España. Aunque no pueda hacer detenciones por la noche. Eso sí es para echarse a llorar.

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