El grupo de solidaridad al refugiado de Zumaia organiza una charla de sensibilización el próximo 26 de febrero, a las 19.00 horas en la Casa de la Cultura Alondegia.

La charla titulada ‘Errefuxiatuen Odisea’ contará con la ponencia de Maryam Fathi, activista de los derechos de las mujeres en Kurdistán y del pueblo kurdo. Fathi, que fue perseguida por el Gobierno por participar en una organización de mujeres que luchaba por los derechos humanos en Irán, huyó de su país a través de una mafia, ya que se enfrentaba a ser condenada a pena de muerte o a una larga pena en la cárcel. Durante un mes fue encerrada junto a su hijo y otras personas en la habitación de un Hotel de Bulgaria y después en Rumanía, donde fueron encontrados por la Policía. Tras pasar un tiempo en Bucarest, Fathi consiguió asilo político y ahora reside junto a su hijo en Bilbao.

Durante la charla, la activista kurda contará de primera mano su lucha y experiencia como refugiada. «Un grupo de voluntarios como nosotros necesitamos saber cómo se puede ayudar en estas circunstancias y qué mejor que traer el testimonio de un refugiado para que nos diga con qué necesidades, barreras y problemas se encontró en el camino y quién y cómo le ayudó», explica el grupo de voluntarios.

El viernes también se ofrecerá la proyección de un video para concienciar sobre la situación. Asimismo, habrá opción de unirse al grupo de voluntarios.

25 voluntarios

El grupo de solidaridad al refugiado cuenta actualmente con 25 voluntarios para ayudar en lo que les sea posible a las personas que puedan llegar desde países como Siria, Irak o Afagnistán, huyendo de la guerra.

Ante la incertidumbre de cómo, cuándo, cuántos y si llegarían o no, la plataforma decidió seguir con su objetivo inicial y ofrecer su solidaridad a refugiados ytambién a inmigrantes llegados de otras países «para que sean ciudadanos de este pueblo». De este modo, la red de voluntarios servirá también para otro tipos de situaciones. «Podemos buscar recursos y utilizarlos en el propio municipio, porque aquí mismo nos podemos encontrar con personas que tienen miles de dificultades», explica el grupo.

«Nuestra intención es hacerles más fácil y agradable la llegada, no tenemos otra pretensión. Si conseguimos sensibilizar y hacer que llegue a más gente lo qué está sucediendo conseguiremos que comprendan más la situación de estas personas», dicen.

El grupo de solidaridad al refugiado de Zumaia se muestra satisfecho con la campaña realizada para captar voluntarios. «Somos un grupo muy diverso y con edades muy diferentes», expresan. Entre las propuestas de ayuda para las que se han ofrecido los voluntarios se encuentran actividades como ocio para facilitar la integración, acompañar a los centros sanitarios o ayudar con el idioma.