El primer ministro jordano, Abdalá Ensur, aseguró hoy al recién nombrado alto comisionado de la agencia de la ONU para los refugiados (ACNUR), Filippo Grandi, de visita en el país, que las fronteras de su país “seguirán abiertas” a los refugiados sirios aunque tendrá que tomar en cuenta la “seguridad”.

“No ha habido cambios en la política jordana de acogida de refugiados sirios. Nuestras puertas siguen abiertas. Jordania permite la entrada de muchos de ellos cada día, pero se deben tomar en cuenta consideraciones de seguridad”, dijo Ensur a Grandi, informó la agencia oficial de noticias Petra.

Se trata de la primera visita a Jordania de Grandi desde su nombramiento a principios de este mes.

El nuevo responsable del ACNUR se refirió a los más de 15.000 refugiados sirios que se encuentran atrapados en la frontera noreste del país con Siria.

El portavoz oficial del Ejecutivo jordano, Mohamed Momani, dijo ayer a un grupo de periodistas que “esos refugiados proceden de áreas del noreste de Siria, controladas por el grupo terrorista Estado Islámico (EI), y podrían haber solicitado asilo en países vecinos”.

“Informes de los órganos de seguridad de Jordania indican que miembros del Daesh (acrónimo del EI en árabe) se encuentran entre esos refugiados”, añadió.

En las reuniones de Grandi con el primer ministro y el rey hachemí, Abdalá II, ambos mandatarios jordanos destacaron que la economía del país se ha visto afectada por el hecho de acoger a 1.400.000 sirios, entre ellos 630.000 refugiados, añadió Petra.

Por ello, el soberano señaló a Grandi que su país expondrá su punto de vista al respecto en la conferencia de donantes para los refugiados sirios que está previsto que se celebre en Londres a principios de febrero.