Una mujer mantuvo como esclavos a dos niños coreanos durante seis años

Las víctimas, una niña que ahora tiene 16 años y su hermano de 14, fueron trasladadas desde Corea del Sur a Nueva York por un familiar de la detenida

Diario Vasco, el diario vasco, 15-01-2016

Parece mentira que en pleno siglo XXI todavía ocurran historias tan escalofriantes como ésta. Una mujer ha sido detenida en Nueva York acusada de mantener a dos niños surcoreanos como esclavos durante seis años. Las víctimas, una niña que ahora tiene 16 años y su hermano de 14, fueron trasladadas desde Corea del Sur a Estados Unidos por un familiar de la arrestada en enero de 2010.

Según ha informado el fiscal del distrito de Queens, Richard A. Brown, Sook Yeong Park, de 42 años, confiscó los pasaportes de los menores y cortó todo contacto con sus padres. Durante seis años les obligó a realizar todas las tareas del hogar hasta bien entrada la noche. No contenta con ello, también debían trabajar fuera de la casa y darle todos los ingresos que obetnían. A cambio, las víctimas supuestamente recibían un lugar para dormir en el suelo sin colchón", denunció el fiscal.

Según las autoridades, la mujer obligaba a la niña tras ir al colegio a trabajar casi a diario durante unas diez horas, hasta las dos de la madrugada, limpiando su domicilio. Incluso le forzaba a darle masajes en la espalda y los pies, y hasta hacerle la manicura y la pedicura. Asimismo, la menor acudió como empleada varios días a la semana a tiendas del barrio, quedándose la acusada con todo el dinero que ganaba.

La situación de su hermano en la ‘casa de los horrores’, como lo describió el propio fiscal, también era angustiosa. Tuvo que trabajar al menos un día al mes en un establecimiento desde el pasado mes de agosto hasta ahora.

La mujer les decía a los dos que tenían que reunir fondos para pagar sus gastos. Alegaba que su madre no estaba enviando dinero desde Corea del Sur para su manutención y cuidado.

Golpeados

Según la acusación, además de tratarles como esclavos, la mujer también golpeó en varias ocasiones a los dos menores. Precisamente, el espeluznante caso se ha resuelto gracias a que el pasado día 7 el subdirector de la escuela a la que acudía la adolescente, tras ver hematomas en sus piernas, acudió al domicilio de la sospechosa y le exigió la entrega de los pasaportes de los niños.

La Policía fue notificada de los supuestos golpes que recibían los niños y detuvo este fin de semana a la acusada. Ésta ha quedado en libertad bajo fianza tras ser imputada de varios cargos, entre ellos el de secuestro, trabajo forzado, agresión y poner en peligro el bienestar de un niño. De ser considerada culpable se enfrentaría a una pena máxima de siete años de cárcel. Por de pronto, su abogado, Dennis Ring, mantiene que no se ha cometido ningún delito.

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