un trailer hacia calais

Joseba asiron acompañó a los voluntarios

Visita del alcalde. El alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, no quiso perder la oportunidad ayer por la mañana de acompañar a los más de 50 voluntarios que se dieron cita desde primera hora en el Paseo de Buztintxuri para colaborar en las labores de carga del trailer que cruzará Francia para repartir ropas de abrigo entre los refugiados del campo de Calais. De hecho, la iniciativa encabezada por Iruña ciudad de acogida ha contado con la colaboración del Consistorio pamplonés, que ha participado con la causa cediendo unos bajos que sirven a la entidad a modo de almacén. Además, el Ayuntamiento de Berriozar aportó algunos operarios y una carretilla montacargas que permitieron agilizar las tareas durante la mañana, en las que también participaron miembros de DYA. Por su parte, la Papelera Navarra facilitó las más de mil cajas con las que se embalaron los muchos productos donados por los ciudadanos. “La respuesta de la gente ha sido fabulosa y nos hemos visto incluso desbordados. Tenemos mucho que agradecer”, indicaba Jesús Denia.

Es casi la una de la tarde y Jesús Denia todavía no ha tomado café. Algún que otro cigarrillo a toda prisa ha sido todo su único sustento en una mañana, la de ayer, llena de nervios y un gran trabajo: cargar, junto con otros muchos voluntarios, un trailer que viajará desde Pamplona hasta Calais lleno hasta los topes de cajas con ropa de abrigo que servirán para vestir a los más de 5.000 refugiados que se amontonan en el campo de refugiados de Calais.

Una iniciativa liderada por Iruña ciudad de acogida, en la que participan otras muchas entidades sociales de Navarra y que surgió el pasado mes de octubre tras un viaje por Europa. “Varias personas estuvimos en las Euromarchas 2015 en las que fuimos hasta Bruselas para protestar por el cambio climático, los paraísos fiscales, la pobreza y, en general, las políticas del Gobierno europeo. El itinerario incluía un paso por Calais, donde varios activistas locales nos llevaron al campamento. Allí vimos que hay que dejarse de lamentaciones y ayudar a la gente de verdad”, asegura.

Tras comprobar sobre el terreno la situación de muchos migrantes provenientes de Mali, Afganistán o Siria en Calais, a mediados de octubre y tras volver de su viaje, Jesús Denia y la iniciativa Iruña ciudad de acogida impulsaron en Pamplona una campaña de recogida de productos básicos como pañales, compresas, algunos alimentos no perecederos pero, sobre todo, ropa de abrigo para que los refugiados puedan afrontar el duro invierno norteuropeo en el campo de refugiados de Calais.

Las pésimas condiciones sanitarias y el carácter improvisado del asentamiento, desde el que cada noche cientos de refugiados acometen el paso del Eurotúnel con rumbo al Reino Unido, le han valido el sobrenombre de ‘la jungla’. Con el paso del tiempo, la situación allí ha degenerado en urgencia no solo por el hacinamiento, sino también por la falta de medios e infraestructuras básicas. “No hay sistemas de drenaje: las tiendas de campaña se han levantado en unas grandes explanadas en las que hay hasta cuatro dedos de barro”, precisa Jesús Denia.

Quizá porque la población supo hacerse cargo de la situación por la que pasarán miles de refugiados en este invierno, la respuesta, en forma de donaciones, fue abrumadora. “Hicimos un llamamiento general y la respuesta fue fabulosa: nuestra idea era llenar un trailer, y tenemos materiales para otros dos más”, asegura Denia. Las normas para el transporte de mercancías en Francia obligan a confeccionar un detallado listado de los productos, y en total, al trailer se volcaron más de 1.000 bultos en forma de cajas. Cada una de ellas, con capacidad para unos 10 kilos, fue llenada con ropa para hombre, mujer y niño. También se incluyeron productos básicos (compresas o pañales), algo de comida y cerca de una treintena de tiendas de campaña. Muchos otros palés, con más productos, tendrán que seguir esperando apilados en uno de los locales que el Ayuntamiento de Pamplona ha cedido a la plataforma para almacenar los productos. Hasta allí, ayer por la mañana, acudieron al menos otros dos grupos de voluntarios con más ropa. Uno de ellos fue Eloy Fernández, profesor de Religión en el colegio Escolapios de Pamplona y que se acercó hasta Buztintxuri al bordo de una gran furgoneta. Por detrás, otros compañeros le seguían en otros dos vehículos. “Todos los años por estas fechas organizamos colectas a través de la Fundación Itaka Escolapios, y este año, sobre todo después de la repercusión mediática que ha generado el tema de los refugiados, hemos decidido colaborar con esta iniciativa”, aseguró Eloy Fernández.

expedición de voluntarios El trailer cargado de ropas de abrigo que partió ayer al mediodía desde Pamplona rumbo a Calais no recorrerá solo los 1.150km que separan la capital de Navarra del norte de Francia. Nueve personas partirán a las siete de la mañana de hoy en furgoneta rumbo a ‘la jungla’ de Calais para comprobar, en primera persona, las condiciones en las que viven los migrantes y refugiados antes de cruzar hasta el Reino Unido. Serán Jesús Denia, que con este viaje suma su tercera visita a la zona en menos de un año, y los voluntarios Juan Pedro Higuero, Joffrey Burgos, Mar Emmanuel Olivera, Antonia Linares y Eva Pillado. El grupo lo completarán, además, los fotoperiodistas Unai Beroiz y Luis Carmona.

“Después de haber montado todo este tinglado los kilómetros nos dan igual: ya nos turnaremos con la furgoneta”, indicaba Eva Pillado después de toda una mañana cargando cajas en el trailer junto con su compañera Antonia Linares, quien añadió que “lo importante, al fin y al cabo, es que los productos lleguen a los que más lo necesitan”. “Ha quedado demostrado que Navarra es una tierra muy generosa”, sentenció.