El pasado domingo familias extranjeras compartieron mesa y mantel con alrededor de 428 familias autóctonas de Navarra y la CAV, con motivo de la celebración de la IV edición de La Familia de al lado – Bizilagunak, organizada por SOS – Racismo, Médicos del Mundo, Asociación Flor de África y la Compañía de Jesús (Jesuitas). Fueron 34 ciudades y localidades de la CAV y Navarra las que participaron en esta iniciativa que tiene lugar en otras partes del mundo y en la que han podido participar este año alrededor de 2.200 personas de más de 30 nacionalidades.

Así, en Navarra, que participa por primera vez en esta solidaria iniciativa, se celebraron 12 comidas en Tudela y otras 4 en Pamplona. En estos encuentros, estas familias con distintas costumbres, culturas y orígenes compartieron unas horas para conocerse y comprobar que tras la diversidad y la diferencia, todos compartimos muchos rasgos y características así como visiones y opiniones similares.

La Familia de al lado – Bizilagunak tiene como objetivo acercar personas y derribar prejuicios, estereotipos y rumores de los que pueden brotar actitudes racistas y xenófobas sobre lo que nos es desconocido, en este caso, las personas que aportan la diversidad que conforma y enriquecen nuestra sociedad.

Por cuarto año consecutivo, este año con más fuerza y sensibilización de la sociedad navarra hacia los refugiados, conflictos y leyes migratorias dirigidas a controlar en vez de prestar protección y asilo, hay familias que quieren hacer de esta tierra un lugar de acogida, más allá de un lugar de llegada. “De eso se trata con estas comidas especiales y diferentes, de difundir y rescatar valores como el respeto y conocimiento mutuo además de convivencia más allá de la coexistencia”, destacan los organizadores.

Esta idea de SOS – Racismo, Medicos del Mundo, Asociación Flor de África y los Jesuitas de que familias locales abran las puertas a familias extranjeras para compartir y celebrar una comida ha ido creciendo y consolidándose ya que en 2014 fueron 230 familias quienes formaron parte del evento frente a las 428, que han participado este año, además de la nueva colaboración de Navarra.

En cuanto al perfil de las familias que han colaborado en La Familia de al lado – Bizilagunak, son personas de todo tipo y condición, que comparten vínculos de amor, amistad y apoyan la convivencia con personas de otras nacionalidades, culturas y costumbres. Para muchas personas extranjeras, que no han tenido todavía la oportunidad de traer y reunir aquí a su familia para vivir una mejor calidad de vida, este evento fue una oportunidad para crear una nueva familia además de crear relaciones de amistad y de apoyo. Una forma de ayudarles a echar raíces aquí. Asimismo, el beneficio de las familias locales recae en descubrir diferentes maneras de ver la vida, pensar y soñar.

Las comidas celebradas el pasado domingo “son ejemplo de que a través del conocimiento y respeto mutuo se puede lograr una sociedad que dé cabía a todas las personas que la conforman independientemente de su índole”. Según los organizadores, los encuentros se desarrollaron excelentemente con la ayuda de un dinamizador que presentó a las familias y ayudó a “romper el hielo en primer momento”. Las familias participantes, que han optado por el anonimato, se mostraron “muy satisfechas” con esta “enriquecedora experiencia, sencilla y gratificante”.