El grupo municipal socialista contradijo y se desmarcó ayer del programa electoral del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, al alinearse junto a sus socios de gobierno de Compromís y Valéncia en Comú pidiendo el cierre del Centro de Internamiento de Zapadores. La propuesta salió adelante en el pleno pese a los votos contrarios de PP y Ciudadanos e incluye cuestiones como el rechazo a las identificaciones de la policía por cuestiones raciales, lo que ha levantado estos días fuertes críticas en los sindicatos policiales en Valencia por la afirmación implícita de que se realizan.

La propuesta de acuerdo se opone a «la detención y traslado a los Centros de Internamiento de Extranjeros de cualquier vecino o vecina del municipio». Es más, insta al Gobierno para que cierre el situado en Valencia y propone un periodo no superior a seis meses para su clausura definitiva.

Sin embargo, el líder nacional socialista no se decanta por el cierre de estos recintos. Todo lo contrario, dado que el programa del PSOE de las próximas elecciones generales indica criterios para la modernización de estos recintos. Incluso se habla de los criterios para los internamientos: «En cada propuesta se tendrán en cuenta las circunstancias individuales y, en especial, el riesgo de incomparecencia por carecer de domicilio o de documentación identificativa».

Otro ejemplo es cuando dice que «para salvaguardar el carácter no penitenciario de los centros, así como los derechos de los internos, se revisará el reglamento de funcionamiento y régimen interior, y se reforzarán los medios que permitan el adecuado control judicial». La petición del cierre del Centro de Zapadores provocó una marejada en el seno del gobierno municipal, dado que los socialistas no estaban de acuerdo con la redacción del documento, sobre todo al referirse a las identificaciones policiales por cuestiones étnicas, además de la propia clausura por entrar en conflicto con el programa del PSOE .

Es más, el portavoz de la formación, Joan Calabuig, intentó hasta última hora un cambio en algunas de las propuestas redactadas por València en Comú. Finalmente esto no se dio y el pacto fue añadir una enmienda de adición de dos puntos más donde se alude a la Policía Local, sin quitar ninguno de los conflictivos, como cuando se indica en el preámbulo que en estos centros de internamiento «se violan sistemáticamente los derechos básicos de las personas, como lo confirman sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos».

Las dos propuestas de adición no eliminaron ninguna de las otras cinco, como se aclaró antes de la votación. Por esta razón, los grupos popular y Ciudadanos votaron en contra de la iniciativa. El portavoz de València en Comú, Jordi Peris, aseguró que «la defensa de los derechos humanos refuerza la lucha contra el terror», en referencia a los recientes atentados en París.

La petición de cierre del centro de internamiento fue tramitada de urgencia, pese a que «lleva abierto desde 1985», precisó el portavoz del PP, Alfonso Novo, quien dijo que «lo urgente es tratar el contenido de la moción, eso sí que es urgente a todas luces», en referencia a las alusiones a las identificaciones policiales por cuestión de raza.

El portavoz de Ciudadanos, Fernando Giner, dijo que «apoyamos la función de estos centros pero con controles administrativos, que se cumpla la ley porque hay informes donde se dice que los internos están peor que en una cárcel». Novo hizo una alusión directa a las contradicciones con el programa electoral de Sánchez. «No entendemos la posición del PSPV en este asunto porque van en contra del espíritu del acuerdo entre Rajoy y Sánchez».

Sobre las identificaciones, Novo aseguró que se «incita a la desobediencia y omisión de deberes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad» y dijo que «si existe algún caso de identificación por esta causa, debería denunciarse», algo en lo que se pronunció también Giner.

Peris centró toda su intervención en la clausura del Centro de Zapadores, donde aludió a informes de la ONU para hablar de deficiencias y hasta malos tratos. Huyó en todo momento de referirse a los dos primeros puntos de la propuesta, donde se pide que no haya identificaciones por cuestión de raza ni colaboración en el transporte público.