valencia. La propuesta del tripartito municipal que insta a los policías de la ciudad a no identificar por el perfil racial y se opone a los traslados de cualquier vecino al CIE despertó ayer críticas de jueces, abogados y policías. Si el miércoles los principales sindicatos policiales acusaban al Consistorio de instar a incumplir la ley, Jueces por la Democracia, abogados y policías nacionales consultados estiman que el Ayuntamiento sobrepasa sus competencias en algunos puntos de su manifiesto.

El tripartito pretende que nadie «sea identificado y detenido por cuestiones raciales y privado de libertad por el solo hecho de encontrarse en situación administrativa irregular». Y el gobierno municipal añade su oposición a «la detención y traslado al CIE de cualquier vecino o vecina del municipio».

Joaquim Bosch es magistrado y portavoz de Jueces para la Democracia (JPD). Estima que en este último punto «el Ayuntamiento se está excediendo de sus competencias, pues la detención y traslado a los centros de internamiento es una decisión plenamente judicial, no municipal». A grandes rasgos, considera inoportuno oponerse de manera tajante a los traslados al CIE «porque habrá casos en los que un juez tenga que tomar esa decisión u ordenar detener con arreglo a la legalidad vigente». En la Policía Nacional opinan de igual modo. «Actuamos y actuaremos siempre en cumplimiento de la ley y en obediencia a los jueces».

En el Colegio de Abogados de Valencia, el razonamiento es similar. «Zapatero a tus zapatos», resume el decano Rafael Bonmatí. «Cada organismo debe actuar según sus competencias y confiar en las diligencia y honorabilidad de los funcionarios y personas implicadas». El abogado no recordaba ni un sólo caso relacionado con actuaciones racistas por parte de policías y Bosch estima que puede haber «alguna detención injustificada, pero son casos muy aislados».

El juez está completamente de acuerdo en que no se debe detener a un extranjero por una situación administrativa irregular, «pero sí en los casos en los que pesa sobre él una orden de expulsión».

La polémica propuesta del tripartito ha sembrado dudas entre policías nacionales y locales, pues los rasgos físicos «sean de blanco o negro, de moreno o rubio, de alto o bajo», pueden ayudar a identificar al autor de un delito, describen agentes consultados. Algunos se preguntan: «Si se produce un robo y los testigos ven huir a un señor con la piel negra o con rasgos chinos, ¿qué hacemos?, ¿paramos sólo a los blancos para no caer en una identificación racial?».