Bilbao – Tres hombres procedentes de Eritrea – un país caracterizado por la pobreza y la falta absoluta de libertades – son los primeros refugiados acogidos en Euskadi dentro del operativo organizado para dar solución a la crisis migratoria en Europa. Estas personas forman parte de un grupo de 19 refugiados del primer contingente de 50 que acogerá el Estado español – “fundamentalmente eritreos y alguno sirio” – tras los acuerdos alcanzados este verano por la Unión Europea para repartir entre sus países hasta 120.000 refugiados en dos años.

Tal y como adelantó DEIA, está previsto que estas tres personas lleguen a Euskadi mañana domingo, después de volar desde la isla italiana de Lampedusa hasta Madrid junto a otros 16 refugiados. Los tres eritreos, que no tienen relación familiar entre ellos, serán trasladados a un piso ubicado en Bilbao y enseguida empezarán a recibir las ayudas y servicios establecidos en el protocolo de acogida diseñado por las instituciones y ONG vascas.

Ayer la diputada foral vizcaina de Empleo, Inclusión e Igualdad, Teresa Laespada, anunció la puesta en marcha del dispositivo que está preparado en el territorio desde hace semanas para acoger a las personas refugiadas. Desde el Ayuntamiento de Bilbao señalaron que el protocolo de actuación de las instituciones vascas “permitirá que su recepción e integración en la sociedad bilbaina se realice con total normalidad” y resaltó la colaboración y coordinación interinstitucional y de las entidades sociales para hacer posible que estas personas lleguen a Euskadi.

Por su parte, el Gobierno vasco informó de que desde el órgano de coordinación institucional “se han puesto ya en marcha los protocolos que se han estado trabajando en las últimas semanas junto al resto de Departamentos, instituciones y ONG, para que esta acogida resulte normalizada, acorde con los derechos que les asisten en virtud de los tratados internacionales y que se puedan integrar plenamente en las localidades en las que van a ser alojados”. El Gobierno dijo que confía – “y vamos a poner todos los medios para ello” – en que estos tres primeros asilados “consigan una estabilidad y dejen atrás esas experiencias de transeúntes en tierras de nadie que han tenido que padecer durante meses y, en algunos casos durante años. Confiamos en que en Euskadi, como tierra de asilo que somos, encuentren la paz y el sosiego que necesitan para organizar y encauzar sus vidas de nuevo”.

vivienda y ayudas El Gobierno considera que la recepción de estas tres primeras personas, a las que está previsto que sigan decenas más en los próximos meses, es “una experiencia que permitirá testar que la red de acogida que se ha organizado en las últimas semanas, y en la que se han volcado todas las instituciones, organizaciones humanitarias, y ciudadanos en general, funciona perfectamente”.

Sobre la situación de los primeros refugiados a partir de su llegada a Euskadi, el portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, adelantó ayer que “una vez alojadas recibirán todas las prestaciones que contempla el sistema vasco de servicios sociales y serán sometidas a un análisis médico que correrá a cargo de Osakidetza”. “El protocolo pactado – puntualizó Erkoreka – contempla que a partir de ahora y en los próximos meses recibirán, en primer lugar, la prestación de servicios de alojamiento y manutención, porque son personas que no tienen residencia ni domicilio aquí en Euskadi. En segundo lugar se les proporcionarán servicios educativos para los que los necesiten, servicios sanitarios y servicios jurídicos, porque se trata de refugiados que tienen un estatuto especial y necesitan cobertura, respaldo y apoyo jurídico”. El portavoz del Gobierno vasco expresó su convencimiento de que la integración de los refugiados en la sociedad vasca se realizará “con toda normalidad y sin problemas”, ya que “los sistemas públicos están perfectamente preparados”. Además, “la sociedad vasca es solidaria y ha hecho un esfuerzo por favorecer la integración de estas personas”.

Tanto del traslado desde Madrid hasta Euskadi, como del trato directo con los tres hombres eritreos que llegarán en las próximas horas se encargarán miembros de CEAR, que – según adelantó el Gobierno vasco – “les van a hacer el acompañamiento día a día y el tutelaje que necesitan para desenvolverse con normalidad en nuestros pueblos y ciudades”.

Crisis migratoria