vitoria – Según Abdelaziz Messaoudi, delegado de Federación Islámica del País Vasco (Fivasco, la filial de Feeri en la CAV), el real decreto que el Gobierno español amagó con sacar adelante y que todavía guarda en el bolsillo por si las negociaciones no avanzan según lo planeado entre los presidentes de Feeri y de Ucide es un gran paso atrás, sobre todo a nivel autonómico. “Al no delimitarse las funciones de la Comisión Islámica de España (CIE) podría incluso elegir nuestro representante en el País Vasco”, critica. Desde su punto de vista, esta, al igual que otras medidas como forzar la elección de un único representante de todos los musulmanes en el Estado son una intromisión en asuntos religiosos que no debería ocurrir. “El Estado no tiene derecho a interceder en asuntos propios de una religión, sea cual sea”.

Además, desde Feeri también critican que la Comisión Asesora de Libertad Religiosa, formada por representantes de las principales confesiones, debatiera a propuesta del Ministro de Justicia un borrador de este decreto archivado. Desde el punto de vista de los musulmanes, es insólito que católicos, protestantes o judíos se pronuncien sobre la fórmula organizativa de la CIE, la entidad que da debe dar su conformidad al nombramiento de profesores de religión, a la llegada de nuevos imanes, a la autorización de mezquitas o a dictaminar sobre la comida halal. “En el fondo, lo único que pretende el Gobierno es acabar con todo lo que hemos hecho en los últimos tres años”. – R.O.