Barcelona. (EFE). – El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, ha pedido este jueves el cierre definitivo del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de la Zona Franca de Barcelona aprovechando que cerrará provisionalmente hasta febrero para hacer obras de mejora.

El defensor de la ciudadanía catalana ha recordado que en los últimos años ha abierto nueve actuaciones de oficio sobre la situación de personas internadas en el centro y ha sugerido que “todos los centros de internamiento de extranjeros del resto del Estado también dejen de funcionar progresivamente”.

Ribó ha hecho esta petición ante el cierre provisional a partir de mañana del CIE de Barcelona para hacer obras de mejora en sus instalaciones. El Síndic también ha recordado que desde el año 2012 le han denegado el acceso al CIE en repetidas ocasiones y ha insistido en considerar que “los centros de internamiento de extranjeros vulneran derechos fundamentales”.

La propuesta del Síndic coincide con la resolución del Parlament de Catalunya del mes de julio de 2015, que ya instó al Gobierno a iniciar "en el más breve plazo posible un proceso que conduzca al cierre progresivo de los centros de internamiento de extranjeros ".

En cuanto a la condición de “irregularidad legal” de las personas extranjeras, el Síndic considera que la irregularidad “no debería ser motivo de internamiento en ningún caso” y recomienda que “se establezcan mecanismos legales que hagan innecesario el internamiento previo ante una eventual expulsión de personas extranjeras en situación irregular”. Ribó ha hecho llegar su petición al Parlament, al Defensor del Pueblo, al ministro del Interior, el comisario europeo de Derechos Humanos y al Comité para la Prevención de la Tortura del Consejo de Europa (CPT).