Un encuentro del cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, con el responsable de la Comisión Islámica de España y presidente de las Comunidades Islámicas de España, Riay Tatary, sirvió ayer para establecer las líneas de colaboración entre ambas confesiones en el ámbito de la ayuda a los refugiados que lleguen de Oriente Medio. Ponerse a trabajar ya, es el objetivo de los dos representantes religiosos. La conversación sirvió para acordar una oración por la paz. Con la reunión y el acuerdo alcanzado ayer la valenciana es la primera diócesis española que toma una iniciativa de estas características, según confirmaron desde el arzobispado.

«No escatimaremos ningún medio», aclaró el cardenal. La Iglesia pondrá a disposición de los refugiados sus recursos y la experiencia de Cáritas para proporcionar a las personas que lleguen «casas y residencia». Además, Cañizares adelantó el apoyo en la búsqueda de trabajo.

Tatary apuntó que ellos no cuentan con tantos medios, pero pondrán a disposición de los refugiados «muchos voluntarios para traducir, acompañar a los refugiados y enseñarles castellano». Adelantó que abrirán una cuenta para recaudar dinero e incluso recogerán alimentos.

En cuanto al momento en que podría iniciarse la recepción de refugiados, Tatary se mostró confiado en que en la reunión que «pronto» mantendrán con la secretaria de Estado de Inmigración, Marina del Corral, se les comunique «una fecha próxima con el número de refugiados que llegarán a España».

Respecto a que la oferta de la Generalitat de traer en barco a 1.100 refugiados aún no se haya puesto en marcha por impedimento del Gobierno, Cañizares aclaró que la UE «marca unas exigencias a las que tienen que atenerse el Estado y la Comunitat. No es ninguna prohibición sino hacer las cosas como es normal que se hagan en un estado donde el derecho tiene que proteger a los ciudadanos». El arzobispo señaló que en la Generalitat saben de la disposición a colaborar del Arzobispado. «Colaboraremos desde lo que somos, desde nuestra identidad religiosa». Cañizares aseguró que «jamás, jamás» pensó en renunciar por las críticas a sus declaraciones en el Forum Europa y al respecto afirmó: «Se me ha calumniado y se ha mentido».