Un profesor y un menor de edad han muerto y otras tres personas han resultado heridas después de que un hombre enmascarado haya irrumpido este jueves con una espada en una escuela de la ciudada sueca de Trollhattan, en la zona del sur del país, según un nuevo balance confirmado por las autoridades locales. Además, el autor del ataque falleció a causa de las heridas que tenía en el tórax y el hígado. Después de ser reducido, el joven fue trasladado al hospital provincial de Norra Álvsborg y operado de urgencia, pero nada se pudo hacer por su vida.

Un portavoz del hospital explicaba a la agencia TT que un profesor murió en el lugar de los hechos, mientras que otras cuatro personas fueron evacuadas con heridas. Entre estas víctimas figuraban dos menores de 11 y 15 años, uno de los cuales terminó falleciendo.

El sospechoso, abatido a tiros por las fuerzas de seguridad, figura también entre los heridos y se encuentra «grave», ha informado el diario The Local. El presunto agresor ha sido intervenido quirúrgicamente.

Un portavoz de la Policía, Stefan Gustafsson, ha informado a los medios de que el atacante utilizó «varias» armas blancas. De él tan solo ha trascendido que se trata de una joven residente en Trollhattan de 21 años.

«Cuando lo vimos por primera vez creíamos que era una broma. Llevaba una máscara y ropa negra y una espada larga. Algunos incluso quisieron hablar con él y tocar la espada», declaró un alumno a la televisión pública «SVT».

Momentos de pánico

Las autoridades han pedido al personal y a los estudiantes del centro de entre seis y quince años de edad que evacuen las instalaciones, donde se ha desplegado un amplio dispositivo de policías y servicios de emergencia. «Estaba en mi clase cuando la hermana de una compañera le advirtió de que había un asesino en la escuela. Cerramos la puerta, pero nuestro profesor estaba en el pasillo», ha relatado un estudiante a The Local que vio al presunto atacante con «una espada».

Varios alumnos salieron para tratar de advertir al profesor, que sin embargo fue apuñalado. Este testigo ha explicado que él mismo tuvo que refugiarse en otra clase: «Si no llego a correr, me habría matado». El ataque se produjo en un café anexo a la escuela de Kronan, con 400 alumnos y situada en el barrio de Kronogården, a unos dos kilómetros del centro de Trollhättan.