Ciudad de México. (dpa) – México ofreció hoy una disculpa pública a los padres de una niña migrante ecuatoriana de 12 años, violada por traficantes de personas, que se suicidó en un albergue de Ciudad Juárez el año pasado después de ser detenida por autoridades mexicanas.

El subprocurador de Derechos Humanos, Eber Omar Betanzos, dirigió unas palabras a los padres en el consulado general de Ecuador en Nueva York y “lamentó el daño ocasionado a la niña y su familia”, informó la fiscalía general mexicana.

La pequeña había salido de la provincia ecuatoriana de Cañar para reencontrarse con sus padres en Estados Unidos, pero fue interceptada por las autoridades migratorias mexicanas cuando iba con un supuesto traficante.

México la envió a un albergue sin notificar al consulado ecuatoriano y ahí la niña se suicidó en un baño.

A pedido de Ecuador, se realizó una investigación conjunta que permitió establecer que había sido violada y maltratada por los traficantes antes de ser detenida.

Betanzos dijo ante los padres de la niña que “los migrantes, en virtud de su dignidad humana y su especial situación de vulnerabilidad, deben ser especialmente protegidos por la ley y las autoridades”, según un comunicado oficial.

Además, dijo que la fiscalía general “trabajará en la capacitación obligatoria de su personal sobre los derechos de niñas, niños y adolescentes en contexto de migración, además de elaborar protocolos de actuación con base en los estándares internacionales de protección de derechos humanos”.

Como parte de las investigaciones, las autoridades de los dos países anunciaron en febrero que lograron desmantelar una organización de tráfico de personas y detuvieron a 42 personas.