ALEMANIA Henriette Reker está todavía en el hospital

La candidata herida ayer por un ataque xenófobo, elegida alcaldesa de Colonia

El Mundo, GUILLEM SANS MORA Berlín, 19-10-2015

La candidata independiente Henriette Reker, víctima de un ataque con cuchillo el sábado, se convertirá con toda probabilidad en la primera alcaldesa de la ciudad alemana de Colonia. Con alrededor de la mitad de los votos escrutados, la candidatura de la política de 58 años sumaba este domingo la mayoría absoluta, con el 52,3 por ciento de los sufragios. Su principal rival, el socialdemócrata Jochen Ott, se quedaba en un 32,4 por ciento. Reker fue gravemente herida el sábado por un hombre de 44 años que dijo actuar por motivos xenófobos. En una visita de la candidata a un quiosco democristiano en un mercado semanal del barrio de Braunsfeld, el atacante le clavó un cuchillo en el cuello, causándole graves heridas en la garganta y la tráquea. Fue operada de urgencia, y este domingo sigue grave, pero su vida ya no corre peligro. Ayer domingo, los médicos que la atienden en la Clínica Universitaria de Colonia confirmaron que su estado de salud evoluciona positivamente. El agresor, según el semanario ‘Der Spiegel’ conocido en círculos neonazis desde los años noventa aunque sin antecedentes, era perfectamente consciente de sus actos en el momento de la agresión, señala el primer informe pericial. Tanto la Policía como la Fiscalía han descartado que el atacante padeciera algún tipo de trastorno psíquico. El atacante justificó su agresión por estar en desacuerdo con la acogida masiva de refugiados, algo por lo que él responsabiliza a políticos como Reker y la propia canciller, Angela Merkel. Cuando fue detenido, aseguró a los agentes que había actuado “de forma premeditada y consciente” por motivos xenófobos. Reker trabajaba en el departamento municipal de servicios sociales y se encargaba de coordinar el alojamiento y las tareas de integración de los refugiados que llegaban a la ciudad. A pesar de la consternación que provocó el brutal ataque, la participación en las elecciones fue más bien baja, con alrededor de un 40 por ciento. La candidatura de Reker contaba con el apoyo de democristianos, verdes y liberales.

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