Al menos siete personas murieron y una permanece desaparecida tras chocar este una embarcación de la Guardia Costera griega con un bote de madera en el que viajaban 39 refugiados y migrantes, que navegaba desde Turquía hacia la isla griega de Lesbos. La guardia costera informó de que ha recuperado los cuerpos sin vida de un hombre, dos mujeres y cuatro niños, uno de ellos un bebé. Las autoridades marítimas todavía buscan a una última persona de este naufragio, de la que desconocen su identidad.

Por el momento, la Guardia Costera ha rescatado a 31 personas y ha lanzado una amplia operación en la que participan embarcaciones de la agencia de la Unión Europea Frontex. Según las primeras investigaciones, el accidente se produjo por el fuerte oleaje y los vientos que reinaban en la zona.

El naufragio de este jueves se produce un día después de que tres personas murieran al volcar una embarcación con 21 refugiados a bordo. La guardia costera pudo recuperar los cuerpos sin vida de una mujer, una niña y un bebé. Un total de 276 personas han sido rescatadas en tres operaciones cerca de las costas de las islas griegas de Lesbos, Quíos y Kos, que registran el mayor número de desembarcos de refugiados debido a su cercanía con Turquía.

Comienza la cumbre de la UE
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) comenzaron su cumbre trimestral en la que esperan garantizar una respuesta a largo plazo frente a la crisis de refugiados procedentes de Oriente Medio que atraviesa Europa. Los líderes tratarán en concreto de acelerar la aplicación de las medidas acordadas hasta ahora y fortalecer la cooperación con países como Turquía, además de reforzar la protección de las fronteras exteriores y el proceso de repatriación de las personas que no logren el asilo.

La reunión tiene lugar después de que el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, haya reclamado a los Estados miembros concretar sus aportaciones a los 2.500 millones de euros que aún faltan del monto total que prometieron para hacer frente a esta crisis. A su llegada a la cumbre, los líderes manifestaron no obstante que no esperan resultados definitivos este jueves.

La canciller de Alemania, Angela Merkel, señaló que no habrá un resultado definitivo en esta cita pero sí confió en que «todos los Estados miembros cumplan sus compromisos financieros y de recursos humanos», el personal que habrá en los centros de identificación y registro de los refugiados, tal y como pide Frontex.

El presidente de Francia, François Hollande, explicó que el objetivo es ayudar a países de fuera de la UE como Turquía, Líbano y Jordania, que acogen a muchos refugiados sirios, porque «si no, sabemos muy bien que lo que puede producirse son movimientos de salida de esos países hacia las costas europeas». «El compromiso que va a tomarse esta tarde es acordar unas ayudas muy importantes a esos países, por nuestro interés, el de ellos y el de los refugiados sirios», adelantó.

El primer ministro británico, David Cameron, dijo que Reino Unido está desempeñando un papel importante como el mayor donante de la UE a los campamentos de refugiados sirios. «Tenemos que hacer más para ayudar a los países vecinos, para ayudar al Programa de Alimentos de la ONU y ayudar en el Mediterráneo», sostuvo.

El primer ministro griego, Alexis Tsipras, afirmó que su país «está preparado para cooperar con Turquía, siempre sobre la base del Derecho internacional y la integridad del proceso de adhesión», pero recalcó que «primero, ahora, es el momento de iniciativas políticas valientes para resolver la crisis siria y parar la ola de refugiados en el Mediterráneo».

Por su parte, el primer ministro holandés, Mark Rutte, dijo que lo más importante hoy es avanzar en la cooperación con Turquía y hacia el establecimiento de campos de refugiados en la región, así hacia la mejora de la protección de la fronteras exteriores de la UE y el establecimiento de centros de registro en Grecia e Italia.

Además, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, avanzó que expondrá a los demás líderes que la Unión realice una fuerte inversión en África para ayudar a combatir la pobreza en estos países y, en consecuencia, evitar la inmigración ilegal.