Con el invierno a las puertas, a dos meses de la Cumbre del Clima y en plena crisis de refugiados por toda Europa, el ayuntamiento de París ha decidido que desaparezcan de sus calles los campamentos de migrantes instalados hace meses y en los que cada semana hay más personas. Desde primera hora de la mañana de este jueves, cientos de policías desalojan los dos mayores campamentos en los que un millar de migrantes vivían en condiciones indignas en pequeñas tiendas de campaña. La alcaldesa, Anne Hidalgo, se ha comprometido a instalar a los migrantes en centros de acogida.

El mayor de los campamentos se había formado junto a la estación de Austerlitz, al sureste de la capital. A la orilla del Sena, y a lo largo de cientos de metros, se alinearon decenas y decenas de pequeñas tiendas de campaña azules, verdes y naranjas utilizadas por una o dos personas cada una. Allí, cerca del imponente complejo de los ministerios de Economía y Finanzas, vivían hasta ahora más de medio millar de migrantes, en su mayoría procedentes de Eritrea y Sudán, pero también de Libia y de otros países africanos.

El campamento se había nutrido también de migrantes desalojados en junio pasado de otros cinco asentamientos instalados en plena ciudad. El más grande estaba en el bulevar de La Chapelle, junto a la estación de metro del mismo nombre. El segundo campamento desalojado esta mañana, en el que había unas 300 personas, se había formado en los alrededores del ayuntamiento del distrito 18, al Norte de la capital.

Anne Hidalgo ha ordenado los desalojos tras contar con una autorización judicial. La alcaldesa había declarado días atrás que sería “aberrante” alojar en centros de acogida a los últimos refugiados llegados a Francia y permitir que otros malvivieran en las calles. Se refería Hidalgo al millar de refugiados sirios e iraquíes que, procedentes de Alemania, fueron trasladados a Francia como medida de solidaridad con Berlín.

Esta vez, Hidalgo ha prometido que, al menos durante un mes como mínimo, distribuirá al millar de evacuados por la veintena de centros de alojamiento para migrantes que existen en la región de París, 12 de ellos en plena capital. Hidalgo anunció la semana pasada que pronto se habilitarán otros siete.

Tras los desalojos de este jueves, en las calles de París quedan al menos otros dos campamentos de migrantes. El más grande, con unas 200 personas, en Clignancourt, al norte de la ciudad. Está integrado por unos 200 rumanos y ya han reiterado que no desean ir a centros de acogida.