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Detenidas en Gipuzkoa tres personas por emplear ilegalmente a extranjeros

Los 14 empleados sin contrato ni Seguridad Social y los dos menores de edad trabajaban en la recolecta de guindilla

Diario de noticias de Gipuzkoa, M. Mariscal, 12-09-2015

donostia – Tres personas han sido detenidas por la Policía Nacional en Gipuzkoa, acusadas de dar trabajo de manera ilegal a 14 inmigrantes y dos menores de edad de origen también extranjero en la campaña de recolecta de guindilla.

Según informó ayer el Ministerio del Interior, la operación se desarrolló el pasado 2 de septiembre, cuando los agentes policiales acudieron a explotaciones agrícolas de Aginaga, Hernani, Urnieta y Usurbil como resultado de una investigación abierta sobre supuestos casos de explotación laboral, empleo irregular y fraude a la Seguridad Social.

Excepto en Urnieta, en el resto de las localidades guipuzcoanas las operaciones se saldaron con detenciones. En la explotación agrícola de Aginaga, la Policía Nacional identificó a ocho trabajadores extranjeros que carecían de contrato y no estaban dados de alta en la Seguridad Social. En la huerta de Usurbil las personas encargadas de la recolecta de guindilla trabajaban en condiciones legales, pero los agentes comprobaron que entre ellos había dos menores inmigrantes que desarrollaban las mismas funciones sin la presencia de sus progenitores.

La tercera actuación se ubicó en una explotación agraria de Hernani, donde trabajaban seis ciudadanos extranjeros sin permiso de residencia o de trabajo en España. Al igual que en Aginaga, ninguno de ellos tenía tampoco un contrato legal ni había sido dado de alta en el régimen de la Seguridad Social.

En este último caso, el empleador es también inmigrante y se encarga de procurar guindillas a una empresa de encurtidos ubicada en una localidad cercana.

Situaciones parecidas, es decir, la posibilidad de que los responsables de la explotación directa de extensiones agrícolas pudieran ser subcontratas de otras empresas dedicadas a la plantación y recolecta de la guindilla es el motivo por el que la Policía Nacional haya advertido de que la operación no se encuentra cerrada y de que no descarta nuevas detenciones relacionadas con este caso.

De momento, los tres empleadores han sido acusados tanto de atentar contra los derechos de los trabajadores por no darles de alta en la Seguridad Social y dar trabajo a menores que carecen del correspondiente permiso. También levantaron actas de infracción a la normativa reguladora de prevención de riesgos laborales, ya que los inmigrantes empleados en la recolecta de guindilla no tenían ni el material ni los equipos de protección individual preceptivos.

No son las primeras detenciones que se producen durante la temporada de la recogida de la guindilla que, a pesar de ser conocida como “de Ibarra”, en realidad se produce mayoritariamente en las localidades de Aginaga, Hernani, Urnieta y Usurbil. Sin ir más lejos, el mismo año pasado por estas fechas dos empresarios agrícolas fueron apresados por el mismo motivo en Aginaga y Usurbil.

Esta práctica, sin ser habitual, se produce habitualmente en el mercado de un producto que goza de mucha estima entre la sociedad guipuzcoana y gran reconocimiento por parte de los expertos gastrónomos de la CAV. Esta fama tiene como consecuencia un precio elevado de la guindilla, pero no se debe únicamente a este motivo. La recolección de este producto exige mucha mano de obra por las características del proceso, lo que encarece el kilo de los “langostinos de Ibarra”.

La regulación del mercado es la tónica general, pero periódicamente surgen casos de empresarios que trabajan para otras firmas y, con el fin de que ambas incrementen sus beneficios, se valen de personas en situación irregular.

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