Patadas y zancadillas para lograr la mejor imagen

Una televisión húngara despide a una periodista tras ser grabada golpeando a refugiados sirios para obtener imágenes más dramáticas

Diario Sur, colpisa, 08-09-2015

Golpes, patadas y zancadillas. Todo vale para lograr la mejor imagen que ilustre el drama de los refugiados que desde hace semanas ocupa portadas e informativos de los medios de comunicación. Es el caso una reportera identificada como László Petra, de la cadena húngara N1, que ha sido despedida tras ser grabada golpeando a refugiados e incluso poniendo la zancadilla a un padre que corria con su hijo en brazos. Todo por captar la mejor imagen del día.

Lage in #Roeszke#Hungary weiter schlimm – Polizei überfordert – Flüchtlinge durchbrechen Polizeikette – Verletzte! pic.twitter.com/GlMGqGwABb

Ha tenido lugar en Roeszke, una localidad cercana a la frontera serbia y donde se ubica uno de los campos de refugiados donde Hungría envía a muchos de los que llegan al país en busca de asilo. Decenas de periodistas trataban de captar el momento en el que decenas de personas trataban de zafarse de los agentes y evitar ser enviados a dicho campo.

La periodista lanza una patada a una niña. /
Twitter de @RichterSteph

Las imágenes, recogidas en dos vídeos, han provocado la indignación internacional tras ser publicados en la red social Twitter por el periodista Stephan Richter. En uno de ellos, de apenas 20 segundos, se observa a un hombre que logra zafarse de varios agentes y corre con un pequeño en brazos. La cámara no lo duda, extiende la pierna y padre e hijo caen al suelo. La mujer se apresura a grabar la dantesca escena ante la mirada atónita del hombre, que trata de ponerse en pie con el pequeño en brazos sin entender del todo lo que acaba de suceder.

En otro vídeo, la misma periodista se acerca a un cordón policial que trata de retener a un nutrido grupo de refugiados. Muchos logran rebasar el cordón y la periodista distribuye golpes y patadas a varios niños, aunque en esta ocasión no tiene éxito y los refugiados continúan su huida.

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