Sociedad
Movilización en las diócesis para acoger refugiados y responder la llamada del Papa
ABC, , 08-09-2015La Iglesia ha ofrecido desde edificios completos a viviendas particulares para recibir a los refugiados Sirios
Al finalizar el rezo del Ángelus el pasado domingo, el Papa Francisco hizo un llamamiento a las parroquias, comunidades religiosas, monasterios y santuarios de toda Europa para que acojan a las familias de refugiados sirios.
Sobre este asunto se pronunció ayer el secretario general de la Conferencia Episcopal Española, José María Gil Tamayo, quien pidió más implicación del Gobierno en esta crisis humanitaria, ya que España cuenta con «suficiente» dinero para afrontar la llegada de los 16.000 inmigrantes que la Unión Europea le ha asignado. Por su parte, multitud de diócesis se plantean ya muchas con la ayuda de Cáritas la manera de acoger a estas personas que huyen de la guerra o el hambre.
«Las palabras del Papa son una llamada de atención necesaria para que todos los cristianos demos un paso más allá de la compasión, la oración y el donativo» afirma Luis Santamaría, sacerdote responsable de nueve parroquias rurales de la Diócesis de Zamora. Este cura explica que de las tres casas parroquiales que hay en sus pueblos, la única que reúne condiciones de habitabilidad ya está ocupada por una familia saharaui. Por otra parte, dice que lo primero será analizar la situación de cada lugar: «En estos pueblos tan pequeños no hay posibilidades de trabajo, no es la mejor opción para que estas familias sirias puedan labrarse un futuro». No obstante, recuerda que todos los católicos «están llamados» a dar una respuesta a esta emergencia humanitaria, «no sólo la Iglesia».
La Diócesis de Málaga se prepara para recibir a los refugiados que le toquen por cupo a España. Hasta el momento, se ha ofrecido un edificio vacío de Cáritas con unas 120 plazas para la posible acogida y desde hace más de un mes se está recogiendo dinero para mandarlo a los campos de refugiados instalados en Serbia, Hungría y Grecia.
El Arzobispado de Valencia ya ha puesto a disposición de cinco familias de refugiados sirios viviendas de su propiedad. A iniciativa del Cardenal Antonio Cañizares se ha creado también una Comisión Diocesana de Ayuda a Refugiados y Cristianos Perseguidos. Pese a todo, el alojamiento no es el principal problema para los refugiados. Estas personas «necesitan asistencia jurídica, requieren de clases de idiomas y de integración cultural».
Las diócesis catalanas están convocando reuniones de trabajo para coordinar esfuerzos. En su mayor parte, lo hacen junto con las delegaciones de Cáritas. Con todo, ya hay quien ha detallado algunos de los medios que pondrá a disposición de los desplazados de la guerra de Siria. El cardenal arzobispo de Barcelona, por ejemplo, anunció el pasado viernes que destinará parte del edificio de La Conreria, en Tiana (Barcelona), sede del antiguo Seminario Menor Diocesano. En concreto, se cederán unas 50 habitaciones para alojarlos.
Según el delegado episcopal de Cáritas en Toledo, José María Cabrero, hay que recibir a refugiados, pero «con planificación y coordinación» para hacer frente a las dificultades que supone la llegada de personas «que no saben hablar castellano, tampoco inglés, y que carecen de cualificación» . Por ello, Cabrero propone acoger a un grupo de familias que puedan relacionarse entre ellas y «se vayan integrando». Su número dependerá del montante de las ayudas del Gobierno central, ya que Cáritas se nutre fundamentalmente de donativos.
La Diócesis de Calahorra y La Calzada – Logroño ha ofrecido 170 plazas de acogimiento. En concreto, se trata de tres casas que la institución posee en las localidades de El Rasillo (40 plazas), Pedroso (70) y Enciso (60), que se utilizan para campamentos, convivencias y retiros espirituales. Según el delegado del Gobierno en La Rioja, Alberto Bretón, «también hay que pensar a largo plazo, porque esas personas tienen que tener un proyecto de vida, un trabajo y las necesidades satisfechas».
(Puede haber caducado)