Otras voces

El Mundo, , 05-09-2015

El precio de la cobardía

Sr. Director:

Los ciudadanos europeos estamos asistiendo con gran preocupación, tristeza e inquietud a la llegada de una multitud de personas que huyen masivamente de la guerra de Siria. Al mismo tiempo contemplamos atónitos como las fuerzas del Estado Islámico están arrasando con odio y sadismo inusitado todo principio de civilización humana.

Mientras tanto los gobiernos de Europa miran hacia otro lado como si con ellos no fuera la cosa: ¿acaso están esperando a que venga el tío Sam una vez más a solucionar los problemas? ¿Y los musulmanes de bien? ¿Que están esperando? ¿O es que están de acuerdo con esta barbarie que se está cometiendo en nombre del Islam? Ni Europa ni el Mundo Árabe pueden permitir esta irracionalidad y fanatismo que se extiende por la zona, de la misma manera que no se permitió y se terminó con la locura nazi.

Si esto no se para, acabaremos viendo dinamitar las pirámides, Abu Simbel o la Sagrada Familia, al igual que los yihadistas han dinamitado Palmira y los talibanes dinamitaron los Budas de Bamiyán, ya que los consideraron ídolos falsos, y lo que es peor, acabaran exterminando a toda persona que no esté de acuerdo con su radicalismo criminal. Miguel Rioja. Correo electrónico.

España no es un país serio

Sr. Director:

España entera no sale de su asombro estos días, al descubrir que los políticos catalanes gozan de una inmunidad especial, que hasta la fecha ha impedido que el sistema judicial en vigor pueda meterles en cintura. Está claro que, tanto el Gobierno actual como el anterior de Zapatero, debían conocer esta limitación de nuestra Justicia. Aunque el que mejor estaba al tanto de este desliz es el Gobierno catalán, que lo ha aprovechado descaradamente hasta llevarnos al precipicio del próximo día 27.

Entonces ¿por qué los diferentes gobiernos no tomaron la iniciativa que ahora deprisa y corriendo, y sobre todo de muy mala manera, ha tenido que adoptar el Gobierno del PP? Porque nunca se han atrevido a meterse con el imperio de Pujol y cía, verdadero pulmón de la corrupción en Cataluña. Resumiendo, vivimos en un país nada serio. Y ante tanto despropósito gubernamental, al final sólo va a ser posible alejarnos de ese precipicio si todos los catalanes de bien, del partido que sean, pues ahora ya da lo mismo, van a votar el día 27 para darle la vuelta a la tortilla, en este caso española de verdad. Pablo Domingo Vela. Correo electrónico.

¿Podemos comer tranquilos?

Sr. Director:

Entro esta mañana en la cafetería de la Universidad donde trabajo y contemplo a los estudiantes sentados en las mesas tomando su desayuno y charlando tranquilamente sobre el inicio de las clases. Preciosa imagen de gente joven, en una dulce etapa de su vida, que se prepara para el futuro. Ver esta imagen llena la mente y el corazón de esperanza. Y vienen rápidamente a mí las imágenes de los jóvenes sirios andando en su huida a Europa, o en los campos de refugiados, en los caminos, en los trenes, en las fronteras, y se me atraganta el capuchino que acaban de servirme. Las mismas sudaderas, las mismas deportivas, la misma pasión por los móviles, casi siempre el mismo look…

¿Podemos sentarnos tranquilos a desayunar, iniciar las clases, hacer vida normal mientras a nuestro lado el drama se cierne sobre tantos, y en especial niños y jóvenes en busca de un futuro mejor? Jóvenes como los que se sientan en mis clases este año no irán a la universidad a pesar de hablar inglés, saber usar los ordenadores y estar sobradamente preparados… y ¿no habrá una silla para estos jóvenes en nuestras universidades? ¿No habrá una cama en nuestras casas para estos niños? ¿No existe un dirigente con creatividad y energía para hacer una propuesta que palie esta situación? Teresa Corzo Santamaría. Madrid.

La intolerancia de la Iglesia

Sr. Director:

El arzobispo de Cádiz le prohibió que fuera padrino de un bautizo por ser transexual. Después, ante el escándalo, lo permitió. Después, el mismo prelado, recibiendo presiones de otro lado, se lo volvió a prohibir. Este vaivén hizo abrir los ojos a su víctima, mostrándole al implicado la falta de criterio de esa jerarquía eclesiástica. De ahí que renunciara a la Iglesia; y sus allegados decidieron no bautizar al niño. Si todo el mundo actuara con seriedad y valentía en estos temas, como ellos, es probable que no existiera una jerarquía católica tan corrupta como la que padecemos en España. María Faes. Correo electrónico.

Hungría, la eterna frontera

Sr. Director:

Durante la Guerra Fría, Hungría marcaba la frontera del mundo occidental con el bloque del Este, cerrando sus fronteras con una valla similar al Muro de Berlín. En 1988, con la caída de Gorbachov, fue Hungría la primera en deshacerse del telón de acero en mayo de 1989, la pionera en el derrumbe de dicho muro.

Hoy, contraria a la tradición, construye un nuevo muro al otro lado, en el lado que daba a la vieja Yugoslavia. Pasamos de la antigua frontera de 355 kilómetros con Austria en 1989 a la nueva de 175 con Serbia 25 años después. ¿Es que no hemos aprendido nada? Los aires de apertura y libre tráfico de personas que se respiraban a finales de los 80 han desaparecido para dar pie al cierre y a la prohibición. Es muy curioso ver cómo cambian los tiempos, y los que derrumban fronteras son ahora los primeros en crearlas. Eduardo Leonelli. Correo electrónico.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)