JOSEAN IZARRA VITORIA
El Ayuntamiento de Vitoria y la Diputación
foral de Álava tomaron
ayer la iniciativa para trasladar las
declaraciones públicas en las primeras
medidas concretas y anunciaron
que aportarán 92.000 euros del Fondo
de Emergencia alavés para ayudar
a los refugiados que procedentes
en países en conflicto están emigrando
hacia centroeuropa. El
alcalde de Vitoria Gorka Urtaran y
el diputado general de Álava comparecieron
ayer para anunciar la
puesta a disposición de esta primera
ayuda económica sin aclarar cómo
se trasladará a las organizaciones
de ayuda que ya trabajan con
los refugiados. Pero, además, Vitoria
está en disposición de acoger a
unas diez familias facilitando
medios para garantizar alojamiento
y prestaciones educativas
y sanitarias. El diputado
general de Álava Ramiro
González adelantó la disponibilidad
de 13 plazas para
menores extranjeros acompañados
que, en principio,
ubicará en el problemático
centro de Bideberria donde,
tal como adelantó EL MUNDO,
se han reiterado las agresiones
de algunos jóvenes con trabajadores
del centro. Incidentes que obligaron
a la diputada foral Beatriz Artolazabal
a buscar con urgencia soluciones
entre las que baraja la
apertura de un nuevo centro que se
ubicaría en el alto de Estíbaliz.
La Diputación alavesa también se
comprometió ayer a ayudar con
subvenciones específicas a aquellos
municipios del Territorio que
también pongan en marcha planes
de acogida aunque sin determinar
la cuantía de unos fondos
que están condicionados a que se
determine el número de
refugiados que serán acogidos
en España y trasladados
al País Vasco.
El diputado general de
Álava Ramiro González
no sólo adelantó estas medidas
durante su comparecencia
pública tras la reunión
del Consejo de Gobierno
foral sino que
apeló a «una toma de conciencia
» por parte de los dirigentes
europeos, entre ellos el presidente
del Gobierno, Mariano Rajoy, porque
«esta cuestión no puede ser
objeto de mercadeo» y urge adoptar
medidas sin cálculos de «mil
personas arriba o mil abajo», que
son de un «egoísmo inaceptable».

URTARAN NO PREDICA
CON EL EJEMPLO
Solidaridad. El alcalde de Vitoria Gorka
Urtaran respondió con rapidez cuando un
incisivo periodista le preguntó si él tenía
previsto acoger en su domicilio a alguno de
los refugiados procedentes de guerras en
conflicto. «No tengo sitio en mi casa»,
explicó el primer edil que acababa de
explicar que Vitoria no sólo facilitará
recursos públicos para acoger a una decena
de familias sino que también pondría en
marcha un registro de familias que
quisieran acoger en sus domicilios a las
personas que buscan asilo en Europa. El
conservador alemán Martin Paltzel,
diputado de la CDU en el Bundestag,
constituye el caso más conocido de político
comprometido ya que alberga en su
domicilio a dos jóvenes eritreos.