Murcia sería una de las últimas regiones en recibir refugiados sirios debido a que ya cuenta con una elevada tasa de población inmigrante. El problema de las personas que están huyendo del conflicto desatado en ese país fue uno de los temas tratados en la reunión que mantuvieron ayer Mariano Rajoy y Pedro Antonio Sánchez. En principio, el presidente del Gobierno no pedirá un esfuerzo al Ejecutivo murciano para acoger a parte de estos refugiados, dijo Sánchez, aunque no está descartado. Dependerá del reparto entre los países europeos. Al término del encuentro Sánchez pidió ser «solidarios» con estas personas que están llegando a Europa. Demandó este apoyo a los desplazados y expresó la necesidad de comprometerse con «una realidad que no son cifras, sino personas que se juegan la vida y buscan una oportunidad».

Indicó que él es nieto de emigrantes, y recordó que los españoles y los murcianos también buscaron «hace años una oportunidad» que muchos consiguieron. Ante la previsible acogida en las comunidades autónomas, dijo que son precisos más recursos de la UE y un gran acuerdo europeo, informa Efe.

Corvera y la autovía del bancal

Por otra parte, Pedro Antonio Sánchez participará en la campaña electoral de Cataluña, a petición de Rajoy. Ambos abordaron también el capítulo de las infraestructuras, y en especial del convenio pendiente de firmar entre el Gobierno murciano y Aena para la clausura de los vuelos comerciales en San Javier. Sánchez indicó que el documento se firmará antes de que acabe la legislatura, así como otro pendiente para la terminación de la ‘autovía del bancal’. La Consejería de Obras Públicas la ejecutará con fondos del Ministerio de Fomento.

El presidente Sánchez apuntó que el Ministerio de Fomento y Adif no van a detener las obras de la primera fase para la llegada del AVE a Murcia. «Conseguimos un acuerdo ventajoso, ya que ninguna otra comunidad autónoma ha logrado arrancar un compromiso como éste, que prevé el soterramiento integral del trazado», manifestó.