Los ministros de Interior de la Unión Europea se reunirán de emergencia el 14 de septiembre con el objetivo de «fortalecer la respuesta europea» a la actual crisis migratoria y de refugiados. Según publicó en Twitter la Presidencia, la reunión se centrará en los procedimientos para devolver a los inmigrantes si sus solicitudes de asilo son rechazadas, en la cooperación con terceros países y en las medidas para evitar el trafico de personas.

La convocatoria se produce horas después de que los ministros de Interior de Alemania, Francia y Reino Unido (Thomas de Maizière, Bernard Cazeneuve y Theresa May, respectivamente) exigieran en un comunicado acordar rápidamente una actuación conjunta sobre los «países de origen seguros», así como la entrada en funcionamiento antes de fin de año de los centros de registro de refugiados previstos en Italia y Grecia.

El primer ministro italiano, Matteo Renzi, exigió una ley europea de asilo: «Hay que cambiar el acuerdo de Dublín y tiene que haber […] un derecho de asilo europeo. Según el acuerdo de Dublín, el primer país de la UE al que llega el refugiado es el que tramita su solicitud de asilo.
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De Maizière advirtió de que Alemania no será capaz de absorber a largo plazo la avalancha de asilados que esperan acoger este año (800.000). La canciller alemana, Angela Merkel, se mostró partidaria de una integración rápida de los refugiados reconocidos, pero de que también sea rápida la deportación de solicitantes a los que se les deniegue.