Tuvieron que hacerlo a nado, ocultos en vehículos o «vulnerando el perímetro fronterizo». Así intentaron llegar a España, a través de Ceuta y Melilla, 7.486 personas durante 2014. El año anterior lo hicieron 4.235, lo que supone un incremento del 77%, según el Balance 2014 de la lucha contra la inmigración irregular que ayer hizo público el Ministerio del Interior. Del total de inmigrantes que llegaron el año pasado, 3.305 procedían de Siria, donde se libra una guerra desde hace cuatro años. El informe advierte de que son «potenciales refugiados».

Es la llegada de estos ciudadanos sirios junto a la presión migratoria africana hacia España registrada en 2014 la que «ha provocado un aumento de un 40,6%» en las llegadas de inmigrantes irregulares.

Durante el año pasado también se registraron cerca de «19.000 intentos de asalto al vallado de Melilla (un 350% más que en 2013)». «El 90% de los asaltantes no accedieron a Ceuta y Melilla», resalta el informe.

En concreto, en 2014 alcanzaron las costas españolas por medio de embarcaciones «4552 inmigrantes irregulares frente a los 3.237 que lo hicieron en 2013», es decir, 1.315 más que el año pasado.