Una buena convivencia en una sociedad diversa y multiétnica requiere conocimiento y entendimiento mutuo. El mejor antídoto contra eventuales brotes de racismo o xenofobia es la información, y eso es justamente lo que el Ayuntamiento quiere proporcionar a los arrasatearras en grandes dosis.

El consistorio ha colgado en su web (arrasate.eus) todo el contenido de un reciente estudio sociológico realizado por Aztiker acerca de la ‘diversidad de origen’ de los 22.100 vecinos de la localidad. Investigadores de este centro con sede en Andoain han examinado el padrón municipal atendiendo exclusivamente al origen de sus ciudadanos, sin reparar «ni en identidades, culturas ni religiones», explicaba Eki Zubiria, de Aztiker. Este centro se encargará, además, de actualizar los datos del estudio en función de las variaciones del padrón municipal.

El estudio presentado esta semana revela que la población ‘nativa’ arrasatearra suma a fecha de hoy 10.255 habitantes, es decir, el 46,4% del padrón. Otro 11,5% corresponde a nacidos en otras localidades guipuzcoanas, y un 13,7%, lo son en algún otro territorio vascos. Así pues, el 71,6% de los empadronados son vascos.

El grueso de los arrasatearras nacidos fuera de Euskal Herria corresponde a inmigrantes españoles y europeos. Son el 21,7% de una población foránea avecindada en Arrasate que incluye además a 752 americanos (3,4%), 383 africanos (1,7%), 353 asiáticos (1,6%) y cuatro oriundos de Oceanía.

Si la población de hombres y mujeres mantiene un equilibrio entre los nativos vascos y europeos, no ocurre lo mismo con los inmigrantes americanos y asiáticos. Las mujeres representan el 62,5% de toda la inmigración americana. Corresponde a una población ocupada fundamentalmente en empleos domésticos y cuidados personales.

En el caso de los asiáticos, los varones copan el 73,4% de toda la población de ese origen.

El estudio realizado por Aztiker establece la media de edad de los arrasatearras en 46,46 años. Pero esa media varía mucho en función del origen, y pone de relieve que se han registrado diferente flujos migratorios a lo largo de los años.

La media de edad más elevada corresponde a los inmigrantes de origen europeo, con 63,35 años. Esta población incluye a la emigración procedente de otras comunidades del Estado llegada entre los años 50 y 80 del siglo XX.

En el otro extremo se sitúa la población migrante extranjera llegada durante los últimos años en busca de trabajo, cuya media edad ronda los 30 años.

Quintana de la Serena

El estudio sobre el origen de los arrasatearras no nacidos en la villa cifra en 4.455 (20,2%) los inmigrantes oriundos de España. El contingente más numeroso lo constituyen los salmantinos (451). Esta población largamente afincada en Mondragón, incluye a 333 naturales de Quintana de la Serena (Badajoz), 288 de Higuera de la Serena (Badajoz), 173 de Morales de Toro (Zamora) o 114 de Valverde del Fresno (Cáceres).

A la inmigración española le sigue en volumen la portuguesa, con 126 ciudadanos lusitanos avecindados.

Fuera de las fronteras de Europa, los inmigrantes americanos provienen en su mayoría del sur de aquel continente. Concretamente, entre los 543 naturales americanos dominan los colombianos (220), los bolivianos (102) y los ecuatorianos (67). También hay dominicanos (87) y hondureños (41).

Entre los 282 africanos afincados en Arrasate, los más numerosos son los marroquíes (200), y entre los 353 asiáticos, los paquistaníes son mayoría (260). El grueso de ellos son originarios de Gujarat (172).

28,4% de origen foráneo

La villa cerrajera acoge una población nacida fuera de Arrasate o de Euskal Herria comparativamente más numerosa que otras localidades del Alto Deba o que la media de Gipuzkoa. Aquí, el 28,4% de la población es de origen foráneo (españoles, europeos, americanos, asiáticos…), mientras que esa media se sitúa en el 23% en Debagoiena, y en el 24% en el Territorio Histórico de Gipuzkoa.