Santa Cruz de Tenerife, 2 may (EFE). – Un matrimonio de nacionalidad rusa está en libertad con cargos después de que fuesen detenidos como presuntos autores de la explotación laboral que personas captadas en Ucrania han sufrido en una finca de cultivo ubicada en el sur de Tenerife, ha informado hoy la Policía Nacional.

Las víctimas recibían promesas de trabajo en España y la promesa de que en Tenerife les reintegrarían el dinero del billete, pero una vez en la finca les impedían salir y vivía en condiciones precarias, sin agua caliente ni electricidad, bajo la amenaza de ser apresados por la Policía al carecer de papeles, se indica en un comunicado.

Durante una inspección, agentes de la Policía Nacional y funcionarios del Ministerio de Empleo y Seguridad Social comprobaron que en una finca había dieciocho trabajadores, de los que quince estaban en situación irregular y de ellos la mayoría eran de nacionalidad ucraniana, mientras que solo una de esas personas estaba dada de alta en la Seguridad Social.

Algunas de esas personas llevaban más de dieciséis meses en la finca, ubicada en la población de Armeñime, en el municipio tinerfeño de Adeje, donde incluso trabajaban el doble de horas de una jornada normal y en condiciones pésimas, explica la Policía Nacional.

Los detenidos son un varón de 39 años y una mujer de 37, que forman un matrimonio de nacionalidad rusa que carecía de antecedentes policiales.

La investigación policial se inició durante la tramitación de una solicitud de asilo político que realizó una ciudadana ucraniana, y se determinó que las captaciones se realizaban por medio de ofertas de trabajo que se publicaban en medios de comunicación de Ucrania.

Las ofertas eran para ofrecer trabajos de decoración en jardinería por 500 euros, y con el compromiso de pagar el coste íntegro del pasaje de avión y los gastos que generase la tramitación del visado.