El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), en sentencia del 17 de febrero contenida en cuatro páginas, ha decidido rechazar el contencioso de 14 inmigrantes que iban a bordo de la patera que naufragó en 2012 en Costa Teguise, arrollada por una patrullera de la Guardia Civil. Hubo un fallecido y seis supuestas desapariciones.

La decisión considera que no ha lugar a que se abra una investigación sobre los hechos por  parte de la Comisión Permanente de Investigación de Accidentes Marítimos, dependiente del Ministerio de Fomento. Se valida con ello la decisión tomada desde la Comisión en febrero de 2013, por entenderse desde este organismo que no el caso no estaba contemplado bajo aspectos ligados a sus competencias.

Los demandantes presentaron en fechas posteriores un recurso denunciando una supuesta inactividad. Se argumenta la decisión en que «en el caso examinado no nos encontramos ante un supuesto de inactividad en la Administración», añadiéndose que «no existe en el presente caso, persona o personas concretas y determinada que tengan un derecho concreto a que se efectúa la investigación que se reclama», se dice por el TSJM.

Los supervivientes, que naufragaron el 13 de diciembre de 2012 tras ser embestida su barquilla por la patrullera Cabaleiro, decidieron interponer una demanda colectiva por responsabilidad patrimonial contra la Administración del Estado. Contaron para ello con ayuda de dos letrados de oficio del Colegio de Abogados de Las Palmas.

Cabe recordar que la patrullera, que había salido al auxilio de la patera, chocó contra la barquilla cuando el patrón abandonó el timón y la dejó al pairo. Se cree que pudo influir una avería en uno de los propulsores que «mermaba considerablemente su capacidad de maniobra», según se llegó a reconocer por la Delegación del Gobierno en Canarias. Como consecuencia, un inmigrante falleció, hubo media docena de supuestas desapariciones y fueron rescatados el resto de los ocupantes, que fueron internados en el Centro de Internamiento de Extranjeros de Barranco Seco, de Gran Canaria.