Unas 200 personas participaron hoy en la segunda manifestación convocada por el movimiento islamófobo Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente (Pegida) en la capital austríaca, Viena.

Según la agencia APA, 600 manifestantes hicieron frente a la convocatoria de Pegida en una marcha alternativa este domingo sin que se produjeran altercados de relevancia.

Un dispositivo policial de 400 agentes mantuvo separados a ambos grupos, que intercambiaron gritos como “Nosotros, el pueblo”, y “Abajo Pegida”.

El orador de la manifestación racista, el suizo Ignaz Bearth, exportavoz de Pegida en Suiza, calificó a los manifestantes opuestos de “izquierda radical roja fascista”.

“Tenéis una cultura que debéis proteger, no financiar vuestro propio genocidio”, apeló a sus propias filas, que respondieron con gritos de apoyo y gestos de saludo levantando la mano derecha, aunque evitando la total similitud con el saludo nazi, prohibido en Austria.

En el discurso, Bearth arremetió contra la inmigración y la Unión Europea.

En la primera convocatoria del grupo islamófobo el pasado febrero en Viena, 250 personas participaron en apoyo a Pegida, mientras la manifestación opuesta estuvo formada por 5.000 personas.