Bilbao – Emocionados y sin palabras. “Los padres de Ada Otuya están ilusionados y felices porque les vamos a ayudar y, gracias a la cuenta corriente que hemos abierto, ahora ven esperanza y tienen una oportunidad para asistir al juicio”, decía ayer Edus, representante de la asociación nigeriana, tras darle la noticia a los familiares de Ada Otuya. Dicha agrupación nigeriana abrió ayer una cuenta corriente para que los ciudadanos que así lo deseen puedan hacer sus aportaciones económicas y ayudar de esta manera a la familia de la joven. Con el dinero recaudado, la organización intentará pagar los billetes de vuelo que traigan desde Nigeria hasta Bilbao a los padres de la víctima y puedan asistir al juicio contra el shaolín. La vista comienza mañana y, tal y como está previsto en el señalamiento, se prolongará hasta el próximo 5 de mayo. “Ya no podrán llegar para el primer día del juicio, pero lo importante es que puedan venir aquí para que se haga justicia por haber matado a su hija”, recalcaba Edus, de dicha organización.

Las personas que quieran colaborar lo podrán hacer poniéndose en contacto con Edus a través de su teléfono personal (609 404 367). Será él quien informe a todos los interesados sobre el número de la cuenta corriente en la que desde ayer se pueden hacer las aportaciones. “Cada gota cuenta, ojalá que consigamos el dinero y puedan venir lo antes posible”, explicada Edus. Su tono de voz emanaba felicidad. “Estoy muy contento, casi tanto como ellos, por estar colaborando de esta manera, se merece que se haga justicia y lo podemos conseguir”, sostenía. Los miembros de la asociación nigeriana tienen claro que también asistirán al procedimiento: “Dure lo que dure, tenemos que estar ahí”.

Si todo va según lo deseado por la organización, los padres de Ada Otuya podrán trasladarse a Bilbao para la próxima semana.

Con retraso

Por su parte, la familia de la otra víctima, la colombiana Jenny Sofía Rebollo, ya tenían el dinero reunido y tienen prácticamente todo listo. Sin embargo, aún les falta un último trámite, el visado; una circunstancia que les impedirá estar mañana en Bilbao para el inicio de la vista. “Mi mamá está muy triste, no llegaremos para el inicio del juicio; pero si todo va bien, la próxima semana estamos allí, porque ya tenemos todo preparado y solo falta el visado”, explicaba ayer a DEIA Mónica, hermana de la víctima. “Todo esto es muy duro. Estamos reviviendo el asesinato de mi hermana hasta en tres ocasiones: la primera cuando nos enteramos de la noticia; después, cuando fuimos a recoger sus restos, y ahora por el juicio. Esto es durísimo”.

“Estamos tan tristes… Sobre todo mi mamá, no se la ve bien, incluso le vendrá bien no encontrarse el primer día con ese hombre por Juan Carlos Aguilar aunque sea lo que ella desea”. Su hermana Vera coincidía en dicha afirmación: “Mi mamá está muy malita, no la veo bien porque la noto cansada. Tal vez no debería ir allá, pero no para de insistir, así que cuando reciba el visado se marchará seguido”, concluía la hermana de Jenny Rebollo.