ZSi no hay tele, al pescadero
cabrón de ‘La que se avecina’ le
sale un tío en voz baja harto del
fascio moderno ZEste inventor
de personajes fue enfermero de
personas hasta que vio que la
ficción es la cura de lo contrario
ZComo él, 8 años pariendo en el
box del humor a un mayorista del
odio, que no hay nada como un
español con un ancestral
mecanismo de defensa en el
trasero ZAhora trae El Eunuco,
teatro mutilado de los clásicos
Z Recio, el mal al mejor precio…RAFAEL J. ÁLVAREZ
1- Señor La que se avecina, ¿en qué
nota usted que les necesitamos?
- Hace tres o cuatro años la gente
nos decía: ‘Me río mucho con vosotros’.
Ahora nos dicen: ‘Muchas gracias,
porque me hacéis olvidar las penas
durante dos horas’. Esa frase es
nueva. El humor es terapia social.
2- ¿De qué es usted mayorista?
- Soy mayorista del humor. Tengo
poca vocación de empresario.
3- ¿Qué le amputarían al clásico
grecolatino Terencio si levantara
la cabeza y asistiera a la libérrima
versión que ustedes han hecho
de su Eunuco?
- Se quedaría muerto ja, ja… Nos
quedamos con la anécdota de un chico
que se hace pasar por eunuco para
seducir a una mujer. Todo lo demás
nos lo inventamos. Fliparía Terencio,
no entendería nada.
4- ¿Usted prefiere al público o al
pueblo?
- Qué pregunta… No sé… Prefiero al
pueblo. Los personajes están hechos
del pueblo y el pueblo es el que ríe
cuando se identifica con alguien que
has creado tú. El público en sí no sé
qué es.
5- ¿Estamos en una realidad de ficción?
- ¿La gente que entrevistas hace esto?
Ja, ja, ja… Hostia, no sé qué
contestarte.
6- ¿Qué le tienta al enfermero que
usted fue el país que somos?
- La cura empieza por uno mismo.
Mi personaje gusta por la intolerancia
y la intransigencia, que forman
parte del ser humano. La gente habla
demasiado. Y los actores también.
Hay actores que están hasta en la sopa,
hablando y hablando. Yo prefiero
que piensen que soy más listo y me
quedo callado. El día que escuchemos
más y nos callemos, irá mejor.
7- Jordi, ¿y si fuera España la que se
independizara de Cataluña?
- Hay un grupo muy grande de gente
que quiere votar, sean independentistas
o no, y prohibirlo no es la
solución. Es vivir la democracia a ratos.
Es como la Monarquía, que no
nos dejan votar si queremos rey o
no. ¿Por qué? Yo no valdría para político,
no sé si lo que digo es demagogia…
Vivimos la democracia a ratos.
8- ¿Qué teatro es un Barça-Madrid?
- Soy poco futbolero. No lo sé. Sólo
fui una vez al fútbol, al campo del
Barça, y me pareció un espectáculo
brutal. Dos bandos… no sé.
9- ¿Qué sabe Antonio Recio de Jordi
Sánchez?
- Yo creo que Antonio Recio no sabe
nada ni de sí mismo. Tiene una dificultad
tan grande para empatizar
que no sabe nada de nadie. Me encanta
como personaje porque tiene
concentrados todos los defectos humanos.
Es ese tipo de gente que te
agrede antes de morder. Antonio Recio
no sabe nada de mí.
10- ¿Somos racistas u ordenados?
- Ah, lo dices por la frase de mi personaje…
Los españoles somos racistas.
Es muy fácil no serlo cuando no
hay gente de fuera, pero en cuanto
aparece la gente de fuera, lo somos.
Se tiende a tratar mal a la gente del
servicio. Tengo amigos que tratan
mal a los camareros o a los carniceros.
Y son blanquitos como ellos. Pero
sí somos racistas. Y espérate…
11- ¿Cuántos fachas hace que usted
está harto?
- Bufff, sí hay, eh. La gente me dice:
‘Eres como tío’ o ‘Me haces una gracia…
es que eres como mi suegro’. Si
no hubiera fachas no sé si este personaje
funcionaría. Yo soy intolerante
con los fachas. Me ponen malo. Y
con los bordes. La gente que se levanta
por la mañana para joder y
ofender no la entiendo. Y los que creen
que tienen la verdad absoluta.
12- ¿Usted tiene 50 años o medio
siglo?
- Me pesan mucho los 50. Pero tengo
la suerte de tener una profesión que
te mantiene joven, porque como te
están echando cada cuatro días no te
puedes apoltronar. Morirme me jode,
pero con 50 años ya eran mayores
cuando yo era pequeño.
(+1) ¿La que se avecina es una serie
o una premonición?
—No, no, no. Es una serie de costumbrismo
punk. Lo que se avecina
es aprender a vivir peor. Nos
minan la moral.