donostia – Idoia Mendia acudió ayer a Araba a poner orden en las filas socialistas después de que la candidata inicial al Ayuntamiento de Gasteiz, Maite Berrocal, renunciara al considerar que desde la ejecutiva provincial le “imponían” quiénes debían ser sus compañeros en la plancha. El alegato de la secretaria general del PSE se dirigió a tratar de levantar el ánimo de su militancia, y con ello el rumbo en las encuestas, pero amén de ensalzar las cualidades del nuevo aspirante a la Alcaldía, Peio López de Munain, la líder del socialismo vasco pasó por alto la crisis, que viene ya de lejos, sin una sola mención al respecto, centrando su discurso en los reproches al PP y al actual regidor, Javier Maroto, a quien acusó de “racista”.

A juicio de Mendia, Mariano Rajoy pretende utilizar el territorio alavés como “laboratorio de pruebas” de las políticas que impulsa el Ejecutivo popular desde Madrid, por lo que ofreció al PSE como alternativa ya que “las causas socialistas” están hoy “más vivas que nunca”, en especial en Gasteiz y Araba, allí donde “los gobiernos de Maroto y de De Andrés no han hecho más que levantar barreras entre las sociedad”. Por ello, animo a afiliados y simpatizantes a salir a la calle “con la cabeza muy alta”, en una clara alusión de que el terremoto interno en el PSE alavés no debería minar la moral ni pasar factura en un territorio donde se prevé una pugna muy apretada no solo entre las cuatro fuerzas tradicionales, ya que a ellas es probable que se sume Podemos.

Denunció Mendia que precisamente hablen de fraude en la distribución de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI), refiriéndose a Maroto, quienes “financian sus sedes con dinero B ”, y es que, según la socialista, tanto el diputado Javier de Andrés como el alcalde “no han hecho más que alimentar las diferencias entre los ciudadanos, barreras entre los de casa y los de fuera, entre ricos y pobres, entre los que pueden defraudar y los que no”. “Son los alumnos aventajados de las políticas excluyentes de Rajoy”, reseñó Mendia, que censuró la “campaña infame impulsada para acabar con las ayudas sociales, generando prejuicios entre los ciudadanos tirando de demagogia barata”.

Diagnóstico con el que convirtió al PP en el enemigo a batir en las urnas alavesas, es decir, una pelea por el sector constitucionalista. “Por suerte, la guerra contra el inmigrante se ha demostrado que es una farsa absoluta. Lo que pretendía ser el trampolín para la victoria ha acabado siendo la tumba política de Maroto”, zanjó. Dirigiéndose al candidato y veterano concejal López de Munain – así como a la aspirante a la diputación Cristina González – , confía Mendia en que “nunca más haya un alcalde racista” en Gasteiz, poniéndoles en valor frente a los actuales dirigentes en Araba, que son “rancios y muy carcas”.

respuesta del alcalde Maroto, que insiste en que “todo el que quiera trabajar e integrarse” tiene su apoyo, no tardó en responder a las críticas de la líder socialista y, a través de un mensaje en su cuenta de Twitter, señaló: “Ayudas, sí. Abusos, no. No te enteras de la fiesta [Mendia]. Lo que quiere tu gente es ayudar al que le hace falta, no que se rían de nosotros”.

Fue la candidata González quien se encargó de azuzar al PNV por respaldar los Presupuestos populares, acusando a los jeltzales de abrazar durante cuatro años sus políticas para “hace quince días” empezar a hacer oposición. Por su parte, López de Munain aclaró que le ha resultado “muy fácil” confeccionar la lista, consensuada “sin ningún problema” con González.