Desde la Avenida de Tolosa
Todos tenían nombre
Diario de noticias de Gipuzkoa, , 30-12-2014El incendio del ferry Norman Atlantic que se inició a primeras horas de la madrugada del Día de los Inocentes concluyó ayer tras una noche infernal de olas gigantescas, vientos huracanados y un frío que hacía temblar a todo el pasaje. A primeras horas de la mañana se dio por concluida la operación con el rescate de los 427 pasajeros, y de los cuerpos sin vida de otros diez. El capitán y cuatro oficiales de la marina italiana fueron los últimos en abandonar el barco. El primer ministro Matteo Renzi resaltó “el extraordinario rescate que se ha llevado a cabo en condiciones meteorológicas prohibitivas”, agradeciendo la colaboración de las autoridades griegas y albanesas. En la operación participaron una decena de embarcaciones, lanchas zodiac y otros tantos helicópteros, algunos con mira nocturna. Aunque el balance final se sabrá dentro de unos días, los datos provisionales han generado satisfacción entre las autoridades italianas, dada sobre todo la magnitud de la tragedia. Estamos ante un capítulo importante de valentía, solidaridad y esfuerzo en común tanto por la Marina italiana, como por embarcaciones mercantes de países próximos que se volcaron en ayudar a los pasajeros. Un acto de generosidad que me hace sentir orgulloso en estos días navideños. Pero, qué le vamos a hacer, yo me acordaba también de las pateras. De esas interminables tragedias, un día sí y otro también, en una terrible soledad, sin ayudas en el Mare Nostrum. Según la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), en 2014 fallecieron al intentar cruzar el Mediterráneo 3.419 inmigrantes. Ha sido un goteo incesante con víctimas de todas las edades y sexo. Debiéramos pensar que cuando una patera se hunde, algo de nuestra humanidad se hunde también. Si todas las personas tenemos los mismos derechos, no puede haber privilegios. Los Estados cómplices nos quieren hacer creer que son solo daños colaterales, para asegurar nuestra seguridad. Pero es mentira. Todos tenían nombre,
(Puede haber caducado)