La sociedad alemana reacciona ante el movimiento xenófobo y antiislam Pegida

La Vanguardia, , 24-12-2014

Berlín. (Afp). – La oposición se organiza en Alemania contra el movimiento anti – islam y antirrefugiados Pegida. Políticos, empresarios y ciudadanos de a pie reaccionan ante la ola populista que recorre el país y defienden la inmigración en nombre de la moral y la economía.

“Ver que respondemos con compasión a la difícil situación (…), que la mayoría de nosotros no siguen a los que quieren aislar a Alemania, esto fue para mí una experiencia muy alentadora de este año”. La frase, lanzada el miércoles por el presidente de Alemania, Joachim Gauck, en su discurso de Navidad, no menciona personalmente a nadie, pero “los que quieren aislar a Alemania” es una clara alusión a Pegida.

Lanzada en octubre en Dresde, capital del land de Sajonia –que solo tiene un 2,2% de población de origen extranjero – , Pegida ha pasado en unas semanas de tener unos cientos de seguidores a reunir 17.500 manifestantes el pasado lunes. El nombre Pegida responde a las siglas en alemán de “patriotas europeos contra la islamización de Occidente”.

El credo de Pegida es el rechazo a una supuesta islamización de la sociedad, a los yihadistas (contra los que todo el mundo está, obviamente, de acuerdo) y los extranjeros que se niegan a integrarse, además de los medios de comunicación (“todos son mentirosos”, dicen), las élites políticas y la multiculturalidad que, según ellos, diluiría la cultura cristiana alemana.

El éxito del movimiento ha sorprendido y preocupado en un país marcado por el racismo extremo de la dictadura nazi. Los analistas señalan que extrae su fuerza del territorio de la antigua Alemania Oriental comunista.

En la misma ciudad de Dresde se han producido manifestaciones contra Pegida que han reunido a políticos, artistas y ciudadanos en general, y lo mismo en otras ciudades, reuniendo en total a unas 20.000 personas, 12.000 de ellas solo en Munich.

La semana pasada, Angela Merkel dijo que no hay lugar en Alemania “para la incitación al odio y la calumnia”. El martes, su ministro de Exteriores, el socialdemócrata Frank – Walter Steinmeier, aseguró a la revista Der Spiegel que “la gran mayoría de los alemanes creen que estas personas tienen que encontrar un refugio con nosotros para escapar de la guerra civil”, refiriéndose a los refugiados sirios.

La poderosa Federación Alemana dela Industria (BDI), que representa a la patronal, cree que Alemania debe acoger más refugiados porque su población está envejeciendo y necesita mano de obra.

Entre la ciudadanía se multiplican las iniciativas a escala local: cursos de alemán gratuitos, exámenes psiquiátricos para niños que vienen de zonas de guerra, formación especial para los trabajadores sociales, a fin de que puedan comprender mejor los problemas específicos de los refugiados, anuncios de habitaciones disponibles en pisos compartidos.. 

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