La llegada de las vacaciones de Navidad supone para muchas familias un momento de enorme dificultad a la hora de cubrir los servicios básicos como la alimentación. El cierre de los colegios y, por ende, de los comedores escolares, llega a triplicar la afluencia de niños a los comedores sociales, como es el caso de Casa Caridad.

La entidad valenciana ha detectado un repunte importante en la asistencia de menores a sus instalaciones desde el pasado lunes, primer día no lectivo en los centros valencianos. Según los datos que maneja la asociación, en su local situado en la calle Santa Cruz de Tenerife recibieron 72 niños, además de los 54 del de Paterna. En total, más de 120, una cifra que prevén que se mantenga hasta el próximo 6 de enero.

El último informe sobre pobreza en Valencia elaborado por la institución refleja que durante el pasado año creció un 32 por ciento el número de familias con niños que acudieron a los comedores de esta entidad. La presencia de menores se incrementó un 44 por ciento y ya suponen casi el 20 por ciento del total de personas que asisten a comer.

Aunque la mayoría tiene entre 0 y 3 años de edad, el mayor aumento (65 por ciento) se observó en menores de entre 10 y 12 años, cuya presencia es especialmente destacable en vacaciones escolares como las de Navidad.

Las atenciones más importantes –debido sobre todo a su significado– que realizará la institución serán las de esta noche, mañana y en la celebración de Año Nuevo. En Nochebuena los comedores recibirán a unas cien personas, provenientes en su mayoría de los albergues con los que cuenta la entidad, aunque también se abrirá a alrededor de treinta usuarios más con la intención de que «nadie se sienta solo durante estas fechas», tal como exponen desde la asociación.

El perfil será el de hombres de entre 41 a 65 años de edad y de nacionalidad española, repitiendo una vez más la tendencia que predomina desde 2008 a causa de la crisis y del retorno de las personas inmigrantes a sus países de origen. Este último colectivo, sin embargo, sigue estando muy presente, sobre todo aquellos de nacionalidad subsahariana provenientes de países con gobiernos conflictivos.

El día de Navidad repartirán, según los datos que maneja Casa Caridad, alrededor de 400 raciones de comida para un perfil de usuario similar al del resto del año.
Cierre de año

Unos 244 voluntarios se encargarán de todas estas atenciones, similares en cantidad a las del pasado año. El cierre de 2014 prevén que siga esta línea, con 435.000 actuaciones, generales, que incluyen más de 375.000 raciones repartidas y casi 19.000 pernoctaciones.

Más allá de las comidas y cenas navideñas, el equipo de la entidad ha planificado un calendario de actividades, con meriendas con turrones y mazapanes donados, campeonatos de parchís y dominó, actuaciones de humoristas y magos, recitales de coros e incluso alguna salida.