Los Mossos d’Esquadra investigan
si la muerte de un menor ayer por
la tarde víctima de una puñalada
en el barrio de Sants de Barcelona
guarda relación con una nueva acción
de miembros de alguna de las
bandas latinas que siguen activas,
especialmente en barrios de Barcelona
y L’Hospitalet de Llobregat.
El menor, de nacionalidad ecuatoriana
y cuya identidad y edad no
trascendieron al cierre de esta edición,
recibió una puñalada en una
pelea que comenzó poco antes de
las 18.30 cerca del parque de la Espanya
Industrial y de la estación de
trenes de Sants. El menor, el cual
también se desconocía si estaba
acompañado en el momento del
ataque o si fue víctima de una caída
–nombre con el que las pandillas
se refieren al ataque contra
miembros de otras bandas, recibió
un navajazo que resultó mortal.
Una unidad de los Mossos d’Esquadra
y otra del Servei
d’Emergències Mèdiques (SEM)
atendieron al joven en el mismo lugar
de los hechos hasta que fue
trasladado de urgencias a un hospital
en estado crítico. Poco después
de haber sido ingresado, sin
embargo, falleció a consecuencia
de las heridas.
Fuentes conocedoras del caso
aseguraron ayer a este diario que
la principal tesis con la que trabajan
los investigadores der la División
de Investigación Criminal
(DIC) apunta a un nuevo ataque de
una de las pandillas latinas que tienen
sus capítulos en el barrio de
Sants o bien se disputan el territorio con grupos rivales, sin que esta
hipótesis fuera ayer confirmada de
forma oficial por los Mossos.
Las pesquisas, muy embrionarias
al cierre de esta edición, apuntaban
en concreto hacia la acción
de una mara conocida como Los
Menores, cuya estructura principal
fue desarticulada antes de verano
por la policía de la Generalitat en
una operación que se saldó con 25
detenciones.
Se trata de una banda considerada
inicialmente como una suerte
de cantera para el resto de pandillas
pero que acabó evolucionando
por su cuenta hasta convertirse en
un grupo autónomo, especialmente
violento y sin vínculos directos
con el resto. Su ámbito de actuación,
según los investigadores, está
centrado en el barrio de Santa
Eulàlia de L’Hospitalet.