Un policía nacional se ha hecho una brecha en la cabeza este miércoles en la frontera de Melilla al intentar frenar la entrada a la carrera de un grupo de magrebíes, se desconoce si marroquíes o argelinos, muchos de los cuales aparentaban ser menores de edad. Según han informado a Europa Press fuentes policiales, el agente se ha lesionado cuando forcejeaba con uno de los que intentaban penetrar en la ciudad española sin presentar su documentación y caer al suelo, golpeándose la cabeza contra un bordillo, le que le ocasionó una herida que requirió siete puntos de sutura.

Los hechos han ocurrido a primeras horas de este miércoles en el principal puesto fronterizo que separa Melilla de Marruecos, el de Beni – Enzar, donde el grupo de personas, aprovechando la aglomeración que se produce en tierra de nadie, “intentó colarse en Melilla”. Sin embargo, prácticamente todos fueron rechazados aunque las citadas fuentes no descartan que “se haya podido meter alguno de ellos”.

Los agentes del Cuerpo Nacional de Policía, que forman el control más cercano a la verja, hicieron frente a este intento de penetración pero uno de sus miembros se llevó la peor parte porque al caer de espaldas al forcejear con uno de los asaltantes , golpeándose la cabeza con un bordillo, lo que le originó una brecha de la que salió abundante sangre.

El funcionario policial fue trasladado en ambulancia a Urgencias del Hospital Comarcal y allí los servicios sanitarios tuvieron que practicarle siete puntos de sutura, si bien su estado de salud no corre peligro.