DAte DE ALTA en el nuevo sistema de comentarios
Maroto dice que luchar contra los abusos en la RGI es "justicia social"
Ibon Areso y Juan Karlos Izagirre ven el fraude "residual"
Deia, , 05-12-2014El alcalde de Gasteiz, Javier Maroto, ha defendido las ayudas de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI), pero ha apelado a luchar contra los “abusos” porque es una cuestión de “justicia social”. Por su parte, los alcaldes de Bilbao y Donostia, Ibon Areso y Juan Karlos Izagirre, respectivamente, han defendido que, si existe fraude, es “residual”.
GASTEIZ. Los tres alcaldes han debatido sobre la polémica en torno al supuesto fraude en la Renta de Garantía de Ingresos.
El alcalde de Gasteiz, Javier Maroto, ha destacado que el propio
consejero, Juan María Aburto, ha reconocido que “en una de cada cuatro
RGI que gestiona el Gobierno vasco hay incumplimientos o fraude” y ha
criticado que el PNV proponga que para pagar todo esto haya que subir
los impuestos.
“Lo que digo es que los vascos somos solidarios y queremos que con
nuestros impuestos se ayude a quien tiene necesidad, pero no estamos
dispuestos a que con los impuestos de todo el mundo se permitan
situaciones de abuso”, ha afirmado. En este contexto, ha defendido que
su propuesta plantea que sea “incompatible” cometer delitos y cobrar la
RGI.
“Yo estoy diciendo que no puede suceder que personas que durante 40
años han trabajado duro cobren una pensión de 500 euros y otros, por
tener tres años de padrón, alcancen hasta 1.200 euros a veces de sueldo
vitalicio”, ha indicado, para añadir que, a diferencia que otros países
de Europa, en Euskadi se permite que “personas en situación irregular
acudan al servicio vasco de empleo y, tras tres años de padrón, logren
un sueldo vitalicio”.
Según ha explicado, hay personas de origen extranjero que le “paran
por la calle” y le dicen que le apoyan y ha incidido en que, al final,
se debatirá la ILP para abordar esta cuestión porque “a la fuerza de la
calle no se le puede decir que no”.
Por ello, se ha mostrado sorprendido por la “cerrazón” del resto de
partidos porque “yo lo que hablo es de ayuda sí, abuso no”. “No planteo
que se elimine la RGI sino los abusos que la norma permite”, ha
indicado, para añadir que más allá de las siglas “estamos hablando de
justicia social”.
Maroto ha recordado que ha tenido que comparecer ante el juez por una
denuncia de SOS Racismo que “ha reconocido públicamente que en Gasteiz
llegó a empadronar de forma ficticia a 1.200 magrebíes en sus locales
solamente con el objetivo de que cumpliesen la antigüedad de los tres
años para acudir a las ayudas sociales”.
Asimismo, ha afirmado que dio de baja a los 1.200 magrebíes y cree
que obró “gestionando bien los recursos y defendiendo la justicia
social”. Además, ha lamentado que los demás partidos han apoyado a SOS
Racismo y le han acusado de “racismo y xenofobia”.
“He explicado que el color de la piel no hace a nadie diferente, que
el acento con el que uno habla castellano o euskera no hace a nadie
diferente, pero lo que no se puede negar es que existen algunos núcleos
de población que su modo de vida es tener una RGI y además se perpetúa
en el tiempo”, ha añadido.
Maroto ha denunciado que en Euskadi se dan casos de pobreza
energética porque “las ayudas no se reparten de forma justa”. “He dicho
que sin subir los impuestos, simplemente con el dinero que el Gobierno
vasco ya ha reconocido como fraude y abuso en las ayudas sociales, con
esos 20 millones da perfectamente para incrementar las pensiones más
bajas en 600 euros al año, 50 euros al mes, que es el equivalente de la
factura energética, eso para mí, es hacer justicia social”, ha agregado.
Por último, ha manifestado que la mitad de la ciudadanía de Vitoria
nació en comunidades como Galicia, Extremadura o Andalucía y tienen
“todo su apoyo” porque vinieron no “a ponerse en una ventanilla a que
les diésemos 1.200 euros”, sino “a trabajar e integrarse”.
IBON ARESO
Por su parte, el alcalde de Bilbao, Ibon Areso, ha reconocido estar
de acuerdo con que haya ayudas pero no abusos y ha incidido en que la
mayor política social es el empleo, pero “mientras la sociedad no sea
capaz de dar empleo a la gente no se le puede dejar tiradas a la gente y
tenemos que tener ayudas”.
“El Ayuntamiento de Bilbao concede del orden de 6.500 ayudas al año. A
final de año nos pueden quedar unas 800 sin justificar, pero muchas
porque las facturas llegan después. A final de año andaremos por las 250
sin justificar, lo que es menos del 3 por ciento”, ha matizado, para
añadir que eso tampoco significa que ese 3 por ciento sea fraude porque
hay que tener en cuenta que “quienes deben hacer esa justificaciones son
personas con habilidades muy limitadas”.
El alcalde ha indicado que el fraude es “absolutamente muy pequeño y
muy relativo” en la parte que gestiona el Ayuntamiento. Asimismo, se ha
preguntado qué se va a hacer contra esas personas. “¿Embargar a estas
personas?, ¿Qué les embargas? si están en una situación prácticamente de
exclusión social”, ha señalado.
Por tanto, ha defendido que debe existir control y que las ayudas
tienen que ser “coyunturales y no estructurales” porque “esto no es una
renta vitalicia”.
JUAN KARLOS IZAGIRRE
El alcalde de Donostia, Juan Karlos Izagirre, ha afirmado que,
si existe fraude, es “residual” y “totalmente asumible”. Ha añadido que
comparte con Areso que la creación de empleo es la “mejor fórmula para
repartir la riqueza siempre y cuando creemos un empleo digno y siempre y
cuando consigamos unas jubilaciones dignas”.
Izagirre ha asegurado que el “problema” es que un tercio de la gente
que percibe Ayudas de Emergencia Social está en paro, otro tercio son
personas que están cobrando un sueldo “indigno” y otro tercero
perceptores con pensiones “indignas”. “Tener empleo claro que es una
buena solución siempre y cuando creemos empleo digno y consigamos que
las jubilaciones sean dignas”, ha añadido.
El alcalde de Donostia ha afirmado que el discurso que utiliza
Maroto es “un poco peligroso”. “Efectivamente, el fraude hay que
perseguirlo, pero ese empeño en perseguir el fraude a mí me gustaría
verlo en otras situaciones y en otros niveles”, ha apuntado.
Izaguirre ha aludido a los “niveles de fraude” en lo que “está este
Estado”. “Es ahí donde hay que perseguir y no en esas pequeñas migajas
que pudiera haber y que yo también comparto con Areso que esa no
justificación de un pequeño porcentaje, muchas veces es mucho más debido
a lo complicado burocráticamente de esas solicitudes que no a un
fraude”, ha manifestado.
“Justicia social sí por supuesto, reparto de la riqueza porque no
podemos dejar a nadie tirado, tenemos recursos suficientes en este país
para hacer frente a esto, control por supuesto, pero más no puede ser y
el control tiene que ser a otros niveles y con otra gente que no está
precisamente pidiendo la RGI”, ha afirmado.
Además, ha defendido que una ciudad sobre todo son personas" y ha
remarcado que para su equipo de gobierno son “ejes fundamentales”
estimular la economía y las políticas sociales. “En San Sebastián, de
4.500 personas que reciben ayudas de emergencia social, el pasado año
2.000 se quedaron sin recibirlas por el Gobierno vasco y el Ayuntamiento
hizo una apuesta para que tuvieran lo que les corresponde”, ha
incidido.
En esta línea ha remarcado que son ayudas que se dan “muy
escrupulosamente” y de las que se hace un seguimiento, por lo que “en
absoluto hay fraude”. “El fraude que puede haber se puede asumir por una
administración porque es mínimo. Habrá pocos trámites burocráticos
administrativos tan exigentes como solicitar ayudas de este tipo”, ha
expresado.
Asimismo, ha considerado que fraude de verdad se da “en otros niveles
y con otro tipo de gente que tiene muchos despachos, empresas y dineros
fuera de aquí”.
(Puede haber caducado)