El alcalde de San Sebastián,
Juan Karlos Izagirre, pagó cerca
de 18.000 euros a la empresa Aztiker
para diseñar un protocolo
de bienvenida a las personas que
se empadronen en la ciudad y
que ha ideado que el primer edil
realice cada trimestre una recepción
solemne en el Ayuntamiento
a los nuevos vecinos.
En base a esta propuesta, que
ha llevado un año de diseño, según
asegura el Gobierno local, el
alcalde vivió ayer su primer baño
de masas con la primera recepción
en el Salón de Plenos a las
cerca de 1.600 personas que se
han empadronado desde septiembre.
Esta última ocurrencia
de Izagirre fue criticada por la
oposición por su «carácter electoralista
» ya que se ha puesto en
marcha a escasos cinco meses de
las elecciones municipales.
Los grupos denunciaron que
es una medida «populista» y censuraron
que el regidor abertzale
haya gastado 18.000 euros para
«esta broma» de protocolo. Frente
a esta iniciativa, emplazaron a
Izagirre a poner en marcha políticas
para evitar que los jóvenes
se marchen de la ciudad por la
falta de oportunidades.