Un hombre y una mujer jóvenes han sido víctimas de un homicidio con arma blanca ocurrido poco antes de las 19.00 horas de la tarde de ayer. Él apareció en los jardines de la cuesta de la Alcazaba y ella en la playa de la ensenada de los Galápagos, ambos dentro de los recintos históricos, la zona céntrica más turística de Melilla.

El hombre, de 30 años, fue encontrado sangrando y tambaleándose, con varios cortes por el torso y el cuello, en estado muy grave en los jardines del paseo de la cuesta de la Alcazaba por algunos viandantes. Cuando la policía hizo acto de presencia, tras ser avisada por los vecinos, el joven todavía respiraba. Tras un paro cardíaco, los servicios sanitarios intentaron sin éxito reanimarle.

Se acordonó la zona y la unidad policial de investigación estaba empezando a buscar pruebas que explicaran lo sucedido cuando a pocos metros, en una playa cercana, aparecía el cuerpo sin vida de una joven con evidentes signos de violencia. La joven, de tan sólo 20 años, había sido brutalmente apuñalada al igual que el chico.

Tras procederse al levantamiento de los cadáveres por parte del juez de guardia, se iniciaron las primeras pesquisas que llevaron a determinar que ambas personas, de nacionalidad marroquí, habían sido víctimas de los mismos agresores.

El asunto se encuentra pendiente de resolución judicial y no se descarta ninguna línea de investigación, aunque todo hace pensar a la Policía que se trata de un suceso que podría enmarcarse dentro de la delincuencia común.

Una hora después del suceso los agentes, tras realizar varias batidas por la zona, procedían a la detención de un individuo sospechoso de guardar relación con el doble homicidio que, según fuentes policiales, tenía diferentes cortes en los brazos.

La zona donde se hallaron los cadáveres permanecerá acordonada y bajo vigilancia policial hasta nueva orden para facilitar la preservación de las posibles pruebas así como la investigación policial del violento acontecimiento.