La banda, que operaba en las provincias de Jaén y Córdoba, concertaba bodas de conveniencia con los extranjeros que querían entrar en España a cambio de dinero o les conseguía contratos falsos de trabajo. La Policía Nacional ha desarticulado a este grupo con la detención de 18 personas y que contactaban con ciudadanos de nacionalidad marroquí que pretendían regularizar su situación en España y a cambio de 10.000 euros les contrataban en empresas ficticias o buscaban parejas para realizar enlaces de interés. Los detenidos estaban altamente especializados y contaban con una persona que por 100 euros facilitaba su domicilio como lugar de empadronamiento y además con un letrado que les ayudaba con los trámites.

La investigación comenzó en el mes de abril en la localidad jienense de Linares, tras la detección de varios ciudadanos de nacionalidad marroquí que portaban diversa documentación sospechosa. Entre los documentos que les intervinieron los agentes se encontraron solicitudes de regularización, contratos, nóminas e inscripciones de parejas de hecho. Con las primeras pesquisas la Policía averiguó que estas personas estaban relacionadas con «una organización dedicada al favorecimiento de la inmigración clandestina».

Pareja de hecho por 2.000 euros

Según el informe policial se constató que la trama estaba compuesta por individuos de origen marroquí y español, asentados en Jaén y Córdoba. Éstos, ya detenidos, se dedicaban a regularizar la situación de extranjeros en España a cambio de cantidades que ascendían hasta 10.000 euros. Para ello organizaban enlaces de conveniencia con ciudadanos españoles a los que pagaban 2.000 euros por hacerse pareja de hecho con un extranjero, o les proporcionaban contratos de trabajos en empresas ficticias en las que nunca llegarían a realizar ninguna actividad laboral real.

La investigación puso de manifiesto que los cabecillas de la banda era los encargados de contactar con los ciudadanos extranjeros que pretendían regularizar su situación. Ya hecho el contacto contaban con la colaboración de otra persona que facilitaba su domicilio por 100 euros para que falsas parejas pudieran citarlo como lugar de empadronamiento en el registro. De esta forma, podían iniciar los trámites como pareja de hecho y conseguir la tarjeta de residente de familiar comunitario.

Hasta el momento se ha arrestado a 18 personas e intervenido diversa documentación relacionada con la actividad ilícita que realizaban, así como contratos de trabajo, altas en la Seguridad Social, inscripciones de parejas de hecho y pasaportes y permisos de residencia. La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.