Hanna Draoui es marroquí, concretamente de Uchda, una ciudad situada en el noreste del país, con una población de medio millón de habitantes. Esta licenciada en Filología Hispánica, casada y madre de una niña de siete años, es una de las agentes sociales que actúa como portavoz en su comunidad dando charlas de prevención del VIH, hepatitis y otras infecciones de transmisión sexual, dentro de los programas que desarrolla Cruz Roja en Murcia. «Para mí ha sido un honor pero un gran reto al mismo tiempo, ya que cualquier tema relativo al sexo sigue siendo un tabú en mi cultura», explica. Draoui indica que «el taller en general ha sido una experiencia inolvidable, ya que he aprendido un montón de cosas y he resuelto varias dudas, además el grupo es un encanto, tanto los formadores como los compañeros. Por todo ello, estoy muy contenta por participar y poner mi grano de arena en expandir la información y sensibilizar a otras personas, por un lado, para prevenir el sida, ya que es algo que está en nuestras manos y, por otro lado, para no discriminar a las personas que ya padecen esa enfermedad».

Destaca algunos datos de la evolución del sida en su país, como el aumento de un 52%, al que llegó en 2011, unido al hecho de que el 80% de los portadores desconocieran que lo eran. También señala que la proporción de mujeres infectadas supera el 40% y que, de ellas, el 70% han sido contagiadas por sus maridos.

«Ante estos datos alarmantes, el Estado se ha dado cuenta de la gravedad de la situación y se ha lanzado una estrategia bajo el lema ‘ninguna nueva infección, ningún fallecimiento, ni discriminación vinculada al sida’», explica. Draoui apunta que algunas de las campañas preventivas son criticadas por algunos sectores de la población que consideran que repartir jeringuillas y preservativos entre personas con adicción y prostitutas incitan a que continúen actuando igual.

Carmen Buendía señala que la figura del agente social es indispensable en la promoción de la salud, ya que está basada en la educación. «Por ello, estas personas tienen que ser un miembro integrado y activo de su comunidad. Con esta figura podemos llegar a colectivos de difícil acceso por circunstancias variadas», explica.

Mary Elizabeth Teran, de la ciudad boliviana de Santa Cruz, es otra de las agentes sociales de Cruz Roja. Es licenciada en Química y Farmacia y madre de un niño. Señala que Bolivia es un país en vías de desarrollo con una sociedad relativamente conservadora que, en los últimos años, ha experimentado un crecimiento de casos de contagios del sida.

Apunta que hay lugares rurales a los que no llega la información ni la asistencia integral debido tanto a factores económicos como a prejuicios sociales y a la escasa educación sexual: «Se tiene que llegar a todos los sectores con la perspectiva de concienciar sobre la problemática y difundir métodos preventivos». Lo que más le ha sorprendido es que muchas personas desconozcan qué es el VIH, así como la falta de información sobre las vías de transmisión.

Olga Kravchynska es ucraniana, de Jarkov, psicóloga, madre de cuatro hijos y, en espera del quinto, acudió a Cruz Roja para poder homologar su título. Y, tras ese primer contacto, decidió seguir colaborando con la asociación. Kravchynska asegura estar encantada de poder echar una mano y ayudar en las tareas de prevención del sida, para ello elabora un informe sobre los datos de afectados en su país.

Labor social

El programa de Cruz Roja está dirigido a extranjeros usuarios de Cruz Roja en la Región. Con ellos contactan por ser asistentes a alguno de los cursos de español para extranjeros, a través de las asambleas locales de Cruz Roja, Casas de Acogida o por ser participantes en los programas de empleo. También hay programas dirigidos a trabajadoras del sexo y a drogodependientes, este último se lleva a cabo en centros penitenciarios.

Cruz Roja colabora también con colectivos de atención al inmigrante a través de distintas asociaciones. Entre 2003 y 2014, 2.000 personas de diferentes nacionalidades han participado en el área de prevención con inmigrantes, de este programa que ha tenido una valoración muy positiva.