La Guardia Civil ha cerrado al paso de personas y vehículos por la carretera nacional que circunvala Melilla durante varias horas y ha clausurado temporalmente los pasos fronterizos de Barrio Chino y Beni Enzar en una noche tensa en la que varios grupos de inmigrantes subsaharianos han intentado acceder a la ciudad autónoma tras algunos intentos de salto de la valla por diferentes zonas de la misma.

Tras un inicio de mes sin apenas incidencias en torno al perímetro fronterizo melillense, esta madrugada volvían a registrarse nuevos intentos de traspasar a la carrera las diferentes barreras de alambre que separan Melilla de la provincia marroquí de Nador.

El primer intento de salto, protagonizado por alrededor de un centenar de inmigrantes de origen subsahariano, se registraba en torno a las 05.00 horas de esta madrugada, por la zona próxima al cementerio marroquí de Moularis, comprendida entre el paso fronterizo de Barrio Chino y la aduana internacional de Beni Enzar, al sur del enclave español.

Se calcula que unos 70 inmigrantes consiguieron repeler el cordón policial marroquí y lograron llegar hasta la valla. Algunos menos lograron superar la primera barrera física y llegar a la llamada ‘zona entre valla’, aunque sólo un joven pudo superar el dispositivo anti-intrusión español y lograr acceder a territorio europeo.

Posteriormente, sobre las 05.20 horas, otro grupo, de unos 300 hombres, aproximadamente, lograba aproximarse a las inmediaciones de Melilla a la altura del poblado marroquí de Farhana, bastante más hacia el norte que el primer intento y muy cerca de la ubicación del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI).

Las fuerzas marroquíes, advertidas por el helicóptero de la Guardia Civil, contuvieron al grueso del grupo de inmigrantes y no dejaron que ninguno pudiera llegar a tocar el vallado fronterizo.

Sobre las 05.50 horas, se avistó a otro grupo bastante numeroso que bajaba del monte Gurugú en dirección a Melilla, aunque muy lejos de las líneas fronterizas. Quizá pertenecieran a este numeroso conjunto de subsaharianos los 150 inmigrantes que una hora después intentaban saltar la valla por la zona comprendida entre el cementerio musulmán y el aeropuerto, casi a medio camino entre las zonas por las que horas antes se habían producido los conatos de entrada.

Además de permanecer cortados al tráfico todos los accesos a la zona perimetral, así como la carretera ML-300, hasta las 08.00 horas de la mañana, Policía Nacional y Guardia Civil clausuraron el paso internacional de Beni Enzar por motivos de seguridad desde las 05.00 hasta las 05.25 horas y blindaron el paso fronterizo de Barrio Chino en el que hubo algunos disturbios de madrugada al coincidir el cordón policial y la presencia de los inmigrantes subsaharianos con la espera de los cientos de porteadores que esperan cada mañana para trabajar en el contrabando de mercancías entre España y Marruecos.

El único inmigrante que logró entrar en esta intensa noche permanece acogido en el CETI, donde hay 1.200 internos, en su mayoría sirios, que esperan una pronta salida hacia el continente europeo.

Aunque el pasado día 11 de noviembre se produjo el avistamiento de un numeroso grupo que se acercaba a la valla de Melilla por la zona sur, los intentos de salto de este lunes son los primeros que se registran en el mes de noviembre, después de que el pasado mes de octubre se registraran hasta 12 saltos y otros tantos acercamientos que no llegaron a culminar en entradas.

Con el de hoy ya son 67 los intentos de salto contabilizados en lo que llevamos de año. En ellos han participado más de 14.000 inmigrantes de origen subsahariano, de los que unos 2.150 han logrado superar el dispositivo anti-intrusión español.