Bilbao – Sus víctimas eran los grupos más afectados por la crisis y siempre ciudadanos extranjeros. Un hombre engañaba a ciudadanos en situación irregular y les ilusionaba con un trabajo. También les ofrecía regularizar su situación administrativa en el Estado. Pero la historia acababa cuando los estafados entregaban su dinero. Las víctimas se quedaban sin trabajo, sin papeles y sin dinero.

Agentes de la Policía Nacional procedieron la semana pasada a la detención de un hombre acusado de ser el autor de estas estafas en Bilbao. Las víctimas abonaban cantidades que oscilaban entre 500 y 2.000 euros. Con ese dinero, el detenido debía realizar el papeleo correspondiente para legalizar a sus clientes. En la mayoría de los casos, los estafados no recibían ningún tipo de información respecto al trabajo que irían a realizar en el futuro ni del salario que cobrarían.

La investigación fue llevada a cabo por agentes adscritos a la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Jefatura Superior de la Policía del País Vasco.

No es la primera vez que un hombre se aprovecha de la situación irregular de los extranjeros. Uno de estos casos tuvo como escenario Bilbao. El pasado 19 de junio, un hombre de 48 años que se hacía pasar por cura del Vaticano fue detenido por la Ertzaintza en la capital vizcaina tras ser descubierto por una de las víctimas. El detenido estaba en busca y captura desde 2008, e incluso era reclamado desde Rumanía. Vivía sin residencia fija e iba por la calle ofreciendo trabajo y una vivienda de alquiler a bajo coste. Una vez que recibía el dinero de sus víctimas, desaparecía.