Díaz asegura que no se puede militarizar el Mediterráneo ni llenar la frontera de concertinas

La Vanguardia, , 14-11-2014

Sevilla. (EFE). – La presidenta de la Junta, Susana Díaz, considera que Europa “está fracasando en cómo está gestionando sus fronteras” y los flujos migratorios y que “tiene pendiente la reunificación social”, a la vez que ha señalado que “no puede ser militarizar el Mediterráneo ni llenar la frontera de concertinas”.

Díaz, que ha participado en el seminario ‘Solidaridad en tiempos de crisis’, ha reclamado a Europa que no mire al Sur pensando que son “los guardianes de la frontera” y que solo están “para impedir que se produzcan flujos migratorios”.

“Europa no puede hacer eso ni puede condenar a las regiones del Sur a hacer eso”, ha agregado la presidenta andaluza, quien ha explicado que a ella nadie le garantiza que cuando se producen “devoluciones masivas” de ciudadanos no hay gente a la que se le vulneran sus derechos porque pueden tener refugio o asilo político.

Ha dicho que aspira a que a Andalucía, que es el Sur de Europa y el Norte de un “continente inmenso”, se le mire como “la puerta” y no como “los guardianes” de las fronteras.

“Europa está fracasando en cómo está gestionando sus fronteras. Ésta no es la Europa que muchos deseamos y en la que creemos”, ha manifestado la presidenta.

Ha apostado por “invertir en origen” y dar posibilidades a quienes “no las tienen” y ha argumentado que la Junta en sus presupuestos para el próximo año, “en un momento de mucha dificultad económica”, no ha “querido recortar” en su política de cooperación.

En ese sentido, ha añadido que en las cuentas de 2015 “había cosas que blindar”, como derechos, servicios públicos, la educación, la sanidad, la atención a mayores o el trabajo por generar empleos, “pero también demostrar que Andalucía tiene conciencia social”.

Díaz ha opinado que Andalucía tiene que demostrar que tiene “ese ADN” de solidaridad y por ello no debe utilizar “la excusa de que Europa se equivoca porque no se da cuenta del austericidio, que está oprimiendo a los ciudadanos y que se está poniendo una venda en los ojos de lo que está pasando a muy pocos kilómetros”.

Asimismo, ha dicho que aspira a que el 0,7 por ciento que se destina a cooperación “sea una realidad en 2020” y por ello seguirán apostando, ya que “quien ha recibido solidaridad tiene que saber que en los momentos de más dificultad la tiene que seguir prestando”.

“Presido un Gobierno que tiene en el ADN la lucha contra cualquier desigualdad, la solidaridad y procurar la justicia social”, ha esgrimido la presidenta, quien ha lamentado que en ante la crisis haya quien tiene “la excusa para recortar en derechos”.

Ha argumentado que si la brecha de la desigualdad se abre y cada vez más ciudadanos están en el umbral de la pobreza “es que vamos en un camino erróneo que provoca daño a las personas”, en las que hay una población más vulnerable, la inmigrante, “que vino a Andalucía o España a buscar una salida a sus necesidades”.

La presidenta ha explicado que en Andalucía hay 700.000 inmigrantes que con la crisis se convierten en parte de esa “población vulnerable” que debe tener acceso a los derechos y servicios en las mismas condiciones, pero que también en su lugar de origen deben contar con la solidaridad de los países desarrollados.

Ha subrayado que el cincuenta por ciento de los recursos de la Junta para integración se destinan a educación, “sin perder de vista la sanidad”, por lo que le “duele” que se pongan sobre la mesa “decisiones por parte de un Gobierno que permita que haya personas que se queden fuera del sistema público de salud”.

“No es posible que cerremos los ojos al hecho de que haya ciudadanos que en un momento determinado, porque tengan o no tengan no se qué papel, se dejen en la puerta de los hospitales”, ha dicho.

Por su parte, Sami Naïr, director del Centro Mediterráneo Andalusí de la Universidad Pablo de Olavide, ha resaltado el compromiso de la Junta en mantener la solidaridad social “en un momento en el que la globalización está destrozando el vínculo social”, por lo que cree que Díaz es “un ejemplo”.

Ha criticado que en Alemania se “expulse” a los inmigrantes si no encuentran trabajo en seis meses, algo que ve “muy grave” y que demuestra que se ha “fracasado” en la creación de una Europa social.

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