Una imagen siempre vale más que mil palabras y esto es precisamente lo que ha recibido el juzgado de instrucción número 27 de Barcelona. Un vídeo de la brutal paliza que recibieron el 11 de octubre pasado unos ciudadanos ucranianos por parte de tres red skins. Como resultado de la agresión, Olesksandr, un ucraniano de 56 años, ha pasado varias semanas en coma después de recibir un golpe brutal con un casco de moto. La víctima se recupera lentamente e incluso ha tenido que volver a aprender a andar. 

El vídeo, que fue grabado con un teléfono móvil, muestra la brutalidad de la agresión en el momento justo en el que los acusados empiezan a increpar, armados con cascos de motos, a un grupo de ucranianos que acudieron a una asamblea organizada por el Comité de Solidaridad con los Antifascistas Ucranianos en el ateneo independentista de La Torna. Allí se hizo una asamblea abierta en apoyo a las repúblicas populares de Donesk y Lugansk. La víctima, acompañado de otros amigos, asistió a la reunión y argumentaron a favor de una Ucrania unida. Algunos de los asistentes tildaron estas opiniones de “fascistas” y fue entonces cuando empezó la trifulca.

A empujones, echaron del local a los que tenían ideas discrepantes. En un momento saltó la chispa y fue entonces cuando los tres acusados empezaron a pegar los ucranianos. Todas las agresiones fueron grabadas por un testigo de la pelea. La grabación finaliza cuando Olesksandr cae al suelo, inconsciente. 

Los agresores huyeron y fueron detenidos días más tarde. El autor, supuestamente, del golpe de casco que dejó en coma el ucraniano continúa privado de libertad de forma provisional acusado de homicidio en grado de tentativa. El fiscal delegado de delitos de odio y discriminación considera que el ataque fue por cuestiones ideológicas.