La presión migratoria no cede y se registra otro intento de salto a la valla

Unos 300 subsaharianos se suben a la alambrada y una treintena permanece en ella dos horas, pero ninguno logra entrar en Melilla

Diario de Noticias, , 01-11-2014

melilla – Un grupo de unos 300 inmigrantes de origen subsahariano protagonizó ayer un nuevo intento de entrada masiva a Melilla a través de la valla fronteriza que separa la ciudad autónoma de Marruecos, que ha vivido un repunte de la presión migratoria en el mes de octubre. El intento de salto de ayer, en el que finalmente ningún inmigrante consiguió acceder a Melilla, es el tercero esta semana, el duodécimo del mes de octubre y el número 63 en lo que va de año.

Según informaron fuentes policiales, la tentativa se produjo sobre las 06.30 horas por la zona comprendida entre los puestos fronterizos de Beni Enzar y Barrio Chino.

Tanto en el lado español como en el marroquí se estableció un fuerte despliegue de seguridad, mientras que la carretera de circunvalación de Melilla, que discurre paralela al perímetro fronterizo, permanecía cortada en algún tramo por motivos de seguridad.

Según la Delegación, la Guardia Civil se encontraba “alertada” tras detectarse los movimientos del numeroso grupo de inmigrantes, motivo por el que se desplegó “con antelación” a las unidades de la Comandancia de Melilla, así como a los módulos de la Agrupación de Reserva y Seguridad (ARS), que se encuentran de refuerzo en la ciudad autónoma.

cooperación policial La cooperación de las autoridades marroquíes logró frenar a la mayor parte de los inmigrantes antes de que alcanzaran la valla, un objetivo que, finalmente, consiguió una treintena.

Estos accedieron a la zona del entrevallado donde permanecieron encaramados durante dos horas. Allí lanzaban gritos de “libertad, libertad” o el tradicional “Bosa, Bosa”. Transcurrido ese tiempo, y ante el fuerte despliegue de la Guardia Civil en la zona, todos los inmigrantes fueron bajando y desistiendo de su actitud y Marruecos se hizo cargo de ellos. “Todos han sido rechazados en frontera, por lo que ninguno ha logrado acceder a Melilla”, subrayaba ayer la Delegación del Gobierno.

Según esta institución, a diferencia de otras ocasiones, en el día de ayer ningún inmigrante se enfrentó a los agentes, ni utilizó ningún objeto contra ellos. De esta manera, los subsaharianos se desprendieron de los ganchos que suelen usar para sortear la malla antitrepa “sin mayor oposición” al requerimiento de los guardias civiles. Así, no se produjeron heridos, ni fue necesaria ningún tipo de intervención por parte del servicio de Cruz Roja.

presión extrema La presión migratoria sobre Melilla es extrema desde hace meses, si bien ha sufrido un repunte a lo largo del mes de octubre, tras un mes de septiembre relativamente tranquilo, con una única tentativa registrada.

El primero de la presente semana se registró el pasado miércoles día 29, protagonizado por unos 350 inmigrantes de los que 3 sí lograron vulnerar por completo el dispositivo antiintrusión y acceder, por tanto, a territorio melillense, mientras que el segundo lo fue en la madrugada del jueves, cuando un pequeño grupo de 20 lo intentó sin éxito por una zona muy próxima al paso fronterizo de Barrio Chino.

En lo que va de 2014, se calcula que alrededor de 14.000 inmigrantes han intentado saltar la valla de Melilla en 63 intentos, tres esta misma semana, doce en octubre, un objetivo que han conseguido en 2014 unos 2.000 subsaharianos. Otros 2.000 inmigrantes han conseguido entrar en la ciudad autónoma por otros medios. – Efe/E.P./D.N.

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