Unas 200 personas subsaharianas han protagonizado un intento de entrada entre los puestos fronterizos de Beni Enzar y Barrio Chino
Alrededor de 30 inmigrantes subsaharianos permanecen encaramados a la valla que separa Melilla de Marruecos tras el intento de salto protagonizado esta mañana por un grupo de unas 200 personas, han informado fuentes policiales. 
Un fuerte despliegue policial a ambos lados de la valla se mantiene desde que, cerca de las seis y media de la mañana, se produjera esta nueva tentativa entre los puestos fronterizos de Beni Enzar y Barrio Chino. 
Algunos de los inmigrantes han conseguido acceder a la zona del entrevallado, desde donde lanzan gritos de “libertad, libertad” o el tradicional “Bosa, Bosa”.
 
La carretera de circunvalación de Melilla, que discurre paralela al perímetro fronterizo, permanece cortada en algunos tramos por razones de seguridad. 
La presión migratoria sobre Melilla es extrema desde hace meses, si bien ha sufrido un repunte a lo largo del mes de octubre, tras un mes de septiembre relativamente tranquilo, con una única tentativa registrada. 
Este jueves, alrededor de una veintena de subsaharianos protagonizaron un nuevo intento de entrada a Melilla. 
A lo largo de 2014, año récord en materia migratoria en Melilla, alrededor de 4.000 inmigrantes han entrado a la ciudad autónoma, de los que alrededor de 2.000 lo han hecho a través de la valla perimetral.