melilla – Unos 14.000 inmigrantes de origen subsahariano pretendieron saltar la valla de Melilla en 2014 en más de 60 intentos, una cifra que supera ampliamente las 38 tentativas registradas durante todo el año 2013. Según datos de la Delegación del Gobierno, se calcula que fueron alrededor de 2.000 los subsaharianos que consiguieron entrar a la ciudad autónoma, utilizando esta vía de la valla perimetral. Por otra parte, tres subsahariano accedieron ayer a Melilla a través de la valla fronteriza con Marruecos.

No obstante, el número total de inmigrantes que consiguieron acceder a la ciudad ronda los 4.000, lo que implica que sólo el 50% de las entradas que se produjeron fueron por la valla, según precisaron fuentes policiales. El resto de los accesos tuvieron lugar, fundamentalmente, a través de los puestos fronterizos y estuvieron protagonizados por inmigrantes de origen sirio, que aprovechan su parecido físico con los marroquíes para cruzar los pasos habilitados.

Los más de 60 saltos que se han producido suponen una media de seis al mes, en un año que ya supera en cifras a 2005, el año de la denominada crisis de la valla. En el mes de octubre se registró un repunte de la presión migratoria con más de una decena de intentos, lo que contrasta con el mes anterior, septiembre, en el que se registró una única tentativa a través de la valla.

malla antitrepa Las dos mayores entradas se produjeron el 18 de marzo y el 28 de mayo, días en los que accedieron a la ciudad autónoma unas 500 personas en cada uno de los dos saltos. Con la instalación de la denominada malla antitrepa, la presión migratoria sobre Melilla sigue siendo extrema, si bien el número de los que consiguen entrar a la ciudad se ha reducido.

Por otra parte, tres inmigrantes de origen subsahariano consiguieron acceder a Melilla a través de la valla fronteriza con Marruecos, que vivió ayer dos intentos de entrada masiva simultáneos y que estuvieron protagonizados por unas 350 personas. La primera se produjo en las inmediaciones del Cerro de la Palma Santa y en ella participaron unas 150 personas y simultáneamente, por la zona de Villa Pilar entró otro grupo de unos 200 inmigrantes. – Efe

el apunte

Efectos negativos de la inmigración en Melilla. El presidente del Gobierno de Melilla, Juan José Imbroda, resaltó ayer las consecuencias negativas que tendría que la ciudad fuera un “coladero” de inmigrantes, por lo que criticó las voces que, desde la “lejanía”, dicen “barbaridades” sobre esta cuestión sin tener un conocimiento real de la situación.