C. Valenciana
La falta de oportunidades propicia el primer gran éxodo del siglo XXI
ABC, , 29-10-2014La falta de oportunidades laborales y una caída de la natalidad que desde el año 2000 había quedado encubierta por el auge la inmigración propiciará que la Comunidad Valenciana encabece la pérdida de población en España durante los próximos quince años. Los expertos coinciden en que el mayor impacto de la crisis económica en una región que basó su crecimiento en sectores como la construcción o el turismo generará un éxodo que, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística (INE), supondrá una caída del censo de 239.830 personas, lo que supondrá el primer gran éxodo del siglo XXI.
En concreto, el organismo público calcula que en los próximos tres lustros abandonarán la Comunidad Valenciana 671.000 personas. Muchas de ellas son extranjeros que llegaron en los últimos años en busca de empleo y que optarán por retornas a sus países.
De hecho, hay un dato demoledor que refleja el agotamiento del mercado laboral. En la actualidad hay 129.795 afiliados extranjeros a la Seguridad Social, 60.000 menos que en 2011.
La profesora de Sociología de la Universidad Europea María José García Santacruz explica que estamos ante un fenómeno de «migraciones económicas», y explica que en el caso de la Comunidad Valenciana ha hecho mella la menor demanda de mano de obra agrícola.
Los expertos auguran que esta tendencia se acentuará en los próximos años y se sumará a la emigración de jóvenes valencianos al extrajero.
La región tiene una de las tasas de paro más alta entre la población menor de veinticinco años a pesar de la excelencia de su sistema educativo, que genera jóvenes cualificados pero sin oportunidades laborales. Según García Santracruz, el problema no es solo que no haya trabajo, «sino que el empleo que se genera no es de calidad ni existen posibilidades de promoción en las empresas».
Jubilados extranieros
En el lado contrario, el INE calcula que 585.000 personas llegarán a la Comunidad Valenciana procedentes de otros puntos de España y del extranjero, básicamente foráneos jubilados que se suelen asentar en los últimos años de su vida en la provincia de Alicante.
De esa forma, el saldo entre la población que abandonará la región y aquellos que llegarán arroja un cómputo negativo de 86.000 personas. El resto procederá de la nueva tendencia demográfica, que comenzará a percibirse a partir de 2015, y por la que en la Comunidad Valenciana, al igual que en el resto de España, la cifra de fallecimientos superará por primera vez a la de nacimientos. Está previsto que el número de mujeres en edad fértil (aquellas que tienen entre quince y 49 años) descienda un 20,8 por ciento.
Nuevo estilo de vida
De hecho, más allá de los aspectos económicos, el historiador y sociólogo de la Universidad Católica de Valencia (UCV) Javier Ros explica que «la caída de la natalidad ha quedado encubierta desde el año 2000 por el auge de la inmigración». Ahora que los extranjeros abandonan la Comunidad Valenciana «hemos apreciado que la natalidad es muy baja».
Este experto también incide en el hecho de que «impera un estilo de vida donde el bienestar es material y muchas mujeres han renunciado a tener hijos». Un fenómeno que, de acuerdo con Ros, «se ha agudizado con la crisis económica»
Evolución dispar
La evolución del censo en los próximo años no será igual en el conjunto de España. De hecho, el INE prevé que aumente la población en cinco regiones (Madrid, Canarias, Baleares, Murcia y Andalucía). Sin embargo, los habitantes que ganarán todas juntas (223.806) no compensarán la pérdida de la Comunidad Valenciana que, según explica Ros, «cuenta con una población más envejecida que el resto de las regiones españolas más dinámicas».
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